Los fitogénicos, una alternativa que promete grandes avances para la clínica canina
Los fitogénicos, fitobióticos o fitogenéticos son sustancias derivadas de las plantas con principios bioactivos, que tienen propiedades farmacológicas y se utilizan en la prevención de enfermedades, tanto en humanos como en animales. Su uso se ha propagado en la veterinaria, siendo los perros una de las especies con las que más se utiliza este tipo de medicina.
Entre las propiedades de los fitógenicos se encuentran el menor riesgo de efectos secundarios y sus efectos antimicrobianos, analgésicos y antihistamínicos. Según María Camila Rodríguez, médica veterinaria especialista en laboratorio clínico, estas sustancias se producen de la combinación entre plantas, hierbas y aceites esenciales. “Lo que se busca con esto es mejorar la absorción de nutrientes, la integridad intestinal y el rendimiento de nuestros animales. Sin embargo, es importante entender que los fitogénicos son preventivos y no curativos, por lo que necesitan mucho más tiempo que los alopáticos para hacer efecto”.
Otra de las características de estas sustancias es que pueden actuar en todos los sistemas del organismo, como el renal, el gastrointestinal, el circulatorio y el respiratorio.“En los perros, por ejemplo, es muy común encontrar barro biliar, como consecuencia de hígados grasos o mala alimentación. Hay medicamentos fitogénicos con alcachofa que nos ayudan a drenar la vesícula y eliminar ese barro”, afirmó la veterinaria, quien además contó que otros componentes como el ginkgo biloba, caracterizado por ser un gran vasodilatador, ayudan al tratamiento de enfermedades como el moquillo.
Por otra parte, la doctora habló de las ventajas que tienen los fitogénicos respecto al uso de otro tipo de fármaco. “Estamos en un momento en la industria en el que hay resistencia bacteriana. Usted le da a un perro un antibiótico y el perro sigue mal, además de que se producen efectos como toxicidad renal, hepática o gástrica. En ese sentido, los fitogénicos, al ser de origen natural, no tienen efectos secundarios. Si uno ve estos medicamentos en relación de costo-beneficio, vemos que su valor no es exagerado, porque además podemos usarlos por tiempo prolongado”.
También se debe tener en cuenta que, en la fabricación de estos medicamentos, se le da especial importancia a la palatabilidad, lo cual hace más sencillo el suministro y la digestión por parte de las mascotas.
Daniel Serrano, director de marca de Laboratorios Pharvet, empresa que se dedica a la fabricación de fitogénicos, explicó algunos otros beneficios que tiene su uso.“Este tipo de medicamentos funcionan de manera preventiva, brindando bienestar animal, lo cual nos enorgullecemos de fomentar en el laboratorio. Para el consumidor siempre será mejor utilizar productos que tengan origen natural, pues estos no llevan residuos, como suele suceder con algunos antibióticos".
Esta alternativa sigue afianzándose como una opción de gran ayuda para los propietarios de mascotas, que a futuro seguirá compitiendo con los fármacos tradicionales. Cabe resaltar que estos medicamentos de origen vegetal pueden acabar con bacterias y virus que ya han desarrollado resistencia ante los antibióticos tradicionales.
El uso en otros animales
Además de utilizarse en mascotas como perros y gatos, los fitogénicos tienen otros usos en diversas especies. En animales de producción pueden llegar, incluso, a mejorar el rendimiento de los mismos.En la porcicultura, ganadería, avicultura, acuicultura y la crianza de equinos se pueden suministrar estos aditivos, que ayudan a aumentar la rentabilidad por medio de la mejoría en los índices zootécnicos. Estos productos, al estar libres de químicos, cooperan a que haya una producción limpia.