La implementación de prácticas integradas aumentan 40% la productividad del cacao
Una revisión realizada por investigadores de la Universidad Nacional de Colombia concluyó que la productividad del cacao en los países tropicales podría aumentar más de 40% si los productores aplican de manera integrada un conjunto de prácticas agronómicas claves. El cultivo, estratégico para el desarrollo rural sostenible, sigue presentando rendimientos bajos debido a manejos inadecuados, según este análisis.
El estudio tomó como base 134 artículos científicos publicados entre 2015 y 2025, seleccionados a partir de una búsqueda en la base Scopus utilizando la metodología PRISMA. Con herramientas bibliométricas como R-Bibliometrix y VOSviewer, los investigadores identificaron tendencias globales, autores más influyentes y las prácticas más repetidas en estudios de productividad.
Entre las 12 prácticas agronómicas identificadas como determinantes, destacan la enmienda del suelo, la fertilización, los sistemas agroforestales, la poda, los sistemas de riego y el control fitosanitario. Estas se aplican desde el vivero hasta la etapa productiva, y su efecto combinado resulta más significativo que su aplicación independiente.
También se subraya que aunque existe un consenso académico sobre las prácticas que mejoran los rendimientos, persisten limitaciones importantes, como la escasez de ensayos de largo plazo y la falta de datos ajustados a las condiciones edafoclimáticas locales, un factor crítico para países con alta diversidad como Colombia.
Para el caso colombiano, la revisión señala desafíos adicionales en la adopción de prácticas adecuadas, especialmente persistentes. Entre ellos, las brechas en transferencia tecnológica, la variabilidad climática y la limitada disponibilidad de asistencia técnica para los pequeños productores.
A pesar de ello, los investigadores concluyen que reforzar la investigación aplicada y promover modelos de manejo integrados podría transformar la competitividad del cacao nacional, mejorar la sostenibilidad de los sistemas productivos y generar mayores ingresos para las familias rurales.
El impulso económico
El estudio Global Importance of the Cocoa Crop, citado en la revista de la Universidad Nacional, señala que el cacao, originario de los bosques tropicales de Suramérica, se ha consolidado como un producto de relevancia económica. Su producción se concentra en África Occidental, con Costa de Marfil y Ghana como principales actores, mientras que en América Latina destacan Ecuador y Brasil. Colombia cerró el año pasado como quinto productor regional con 73.678 toneladas.
El documento también revela que el cacao atraviesa un ciclo de precios sin precedentes: pasó de promediar US$2.300 por tonelada en 2022 a superar los US$10.000 en 2024. Según se explica, este aumento se explica por un déficit global generado por el cambio climático, el envejecimiento de las plantaciones y el avance de enfermedades que han afectado la producción africana, junto con una demanda internacional al alza.
Aunque el cultivo representa una fuente de ingreso para los pequeños productores, el estudio advierte que no siempre garantiza estabilidad económica. En África Occidental muchos agricultores aún no alcanzan un ingreso digno, mientras que en Colombia la rentabilidad depende directamente del rendimiento por hectárea y del acceso a asistencia técnica.