Cuídese del perforador de semilla de cacao, una plaga que deja pérdidas de hasta 50%
El cultivo de cacao en Colombia ha demostrado ser una alternativa rentable para las familias productoras. Según Agrosavia, el producto local es conocido a nivel mundial por su sabor y aroma distintivos que solo posee 5% de la población mundial. Pero hay varios factores que amenazan esta fuente de ingresos, como las distintas plagas e insectos que dañan siembras completas.
El perforador de la semilla de cacao o Carmenta foraseminis, se ha convertido en una de las principales limitantes fitosanitarias en la producción de cacao en el país, ocasionando pérdidas superiores a 50%, teniendo un gran impacto económico.
Agrosavia presentó algunas recomendaciones tecnológicas como esquemas de manejo de poblaciones de la plaga y un método de monitoreo para el reconocimiento del daño externo en fruto caracterizado por la presencia de excretas y el síntoma de "peca". La implementación de prácticas culturales, como la remoción, colecta, solarización o entierro de frutos con síntomas de afectación por esa polilla, se sugiere como la principal estrategia para reducir las pérdidas de grano.
Este método ha sido validado y se considera eficiente y eficaz en la reducción de poblaciones y daño producido por C. foraseminis, llegando a reducir las pérdidas de grano ocasionadas por debajo de 5%. Se recomienda su uso en los departamentos de Antioquia, Boyacá, Cundinamarca, Norte de Santander y Tolima.
El "Perforador de la Mazorca del Cacao" fue reportado por primera vez en Colombia en el occidente del departamento de Antioquia en 1957. A pesar de algunos trabajos de identificación y notas sobre los daños, características e importancia económica del insecto, nadie se preocupó por él hasta que se realizó el estudio de su ciclo de vida en 1990. Entretanto, el insecto se ha diseminado desde el occidente hasta cubrir todo el suroeste del departamento de Antioquia y se ha registrado su presencia en algunos municipios productores de cacao del departamento de Norte de Santander, según explicó Agrosavia.
Las pérdidas en la producción de cacao debido a la plaga son significativas. En 2009 y 2010, la Compañía Nacional de Chocolates registró pérdidas de alrededor de 30% del grano comercial en la Granja La Nacional del municipio de Támesis (Antioquia), mientras que la Federación Nacional de Cacaoteros de Colombia estimó que las pérdidas en su Granja Rafael Rivera, municipio de San Jerónimo (Antioquia), fueron del orden de 50%. Estas situaciones indican la necesidad de adoptar medidas de control efectivas y accesibles al agricultor.
Para el manejo del perforador de la semilla de cacao Carmenta foraseminis, la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (Agrosavia) presentó una oferta tecnológica como una alternativa de control eficaz. El ciclo biológico de la plaga se compone de cuatro estados que se desarrollan en 57 días: adulto, huevo, larva y pupa. El apareamiento tiene lugar en sitios de beneficio o donde las condiciones ambientales son favorables.
El manejo integrado de plagas (MIP) es una estrategia para el control de plagas que busca minimizar los efectos negativos de los plaguicidas en el ambiente y la salud humana. El MIP implica el uso de diferentes métodos de control, tales como la manipulación del ambiente, el uso de enemigos naturales de la plaga y el uso selectivo de plaguicidas.
El MIP es particularmente importante en el cultivo de cacao, ya que el uso indiscriminado de plaguicidaspuede tener efectos negativos en la calidad del grano y en la salud de los trabajadores y consumidores de cacao. Además, es un producto que se siembra en zonas tropicales y subtropicales, donde la biodiversidad es alta y las condiciones ambientales pueden favorecer el desarrollo de plagas.
Para implementar un programa de MIP en el cultivo de cacao es necesario conocer la biología y ecología de las plagas, así como las condiciones ambientales que favorecen su desarrollo. También es necesario capacitar a los productores en la identificación de las plagas y en el uso de las diferentes estrategias de control.
El uso de enemigos naturales de las plagas es una estrategia importante en el MIP. En el caso del cacao, existen diferentes especies de avispas parasitoides que atacan a las plagas del cultivo, como el perforador de la semilla de cacao. Estas avispas depositan sus huevos en las larvas de la plaga, lo que impide su desarrollo y reduce la población de la plaga.
Otra estrategia importante en el MIP es la manipulación del ambiente. En el caso del cultivo de cacao, esto puede incluir la eliminación de plantas hospederas de la plaga, la rotación de cultivos y la poda de los árboles de cacao para favorecer la circulación del aire y la entrada de luz solar.
El uso selectivo de plaguicidas es otra estrategia importante en el MIP. En el caso del cultivo de cacao, se recomienda el uso de estos productos de baja toxicidad para las personas y el ambiente. También es importante aplicar los plaguicidas de manera adecuada, siguiendo las recomendaciones del fabricante y evitando su uso excesivo.
El MIP es una estrategia eficaz para el control de plagas en el cultivo de cacao, ya que permite reducir la población de las plagas sin afectar la calidad del grano y la salud humana. Además, el MIP contribuye a la conservación de la biodiversidad y al desarrollo sostenible del cultivo de cacao.
El manejo integrado de plagas es una estrategia eficaz para el control de plagas en el cultivo de cacao, ya que permite reducir la población de las plagas sin afectar la calidad del grano y la salud humana. Además, el MIP contribuye a la conservación de la biodiversidad y al desarrollo sostenible del cultivo.