Conozca la forma en que la agricultura de precisión puede ayudar para sus cultivos
La llegada de la tecnología no se ha hecho ajena a las prácticas agrícolas en el mundo de la producción. Los procesos se han visto permeados con la aparición de nuevas herramientas que permitan a los productores tener un mejor control, tratamiento y monitoreo de los mismos; todo con el propósito de tener un mayor rendimiento.
Evidentemente, con las nuevas tecnologías llegan nuevos métodos y nuevos conceptos. En este caso, la necesidad de que la agricultura sea cada vez más sostenible (por la situación del medio ambiente) ha hecho que se genere una nueva práctica como lo es la agricultura de precisión.
Es importante recalcar que este es un método que va un poco alejado de lo que conocemos como la agricultura tradicional. Esto se debe a que herramientas como satélites, robots o big data, son los que ayudan a que la agricultura de precisión se pueda desarrollar en algún tipo de cultivo. Toda esta tecnología se usa con un solo propósito: poderle dar el mantenimiento adecuado al territorio y entender sus necesidades a la perfección.
La Universidad de Antioquia define este método como “un conjunto de tecnologías que buscan optimizar la producción agrícola a través del manejo de la variabilidad (espacial y temporal) de los factores de producción del cultivo.”
En términos de sostenibilidad, este método es clave para el desarrollo del cultivo ya que ofrece una mejor trazabilidad del mismo, haciendo que el consumidor o el comprador pueda saber cuales son las implicaciones que tuvo el producto en su proceso de cosecha. De igual forma, permite implementar mejores métodos en lo que respecta a la fertilización, provocando que sea evitable el uso de químicos innecesarios y pudiendo llegar a tener mejores conclusiones para su tratamiento.
Por otro lado, el seguimiento satelital es clave para que se generen mapas de productividad, en los que se establezca cuales son las zonas del terreno más aptas para la siembra. De esta forma la producción podrá optimizarse, disminuyendo el riesgo de pérdida del cultivo o incluso, de materia prima.
El seguimiento cuantificado dentro de los cultivos siempre podrá ofrecer alguna idea de como está o como se proyecta su rendimiento. La función de la big data es fundamental para tener en cuenta si su plantación está logrando resultados esperados. Ciertamente, también puede manifestar las complicaciones que puedan estar sucediendo dentro del proceso productivo, haciendo visible la necesidad de nuevos tratamientos o la búsqueda de soluciones.