Usar aves en ganadería proporciona mayor productividad y ayuda a controlar plagas
Una investigación liderada por Fedegan, The Nature Conservancy, el Centro para la Investigación en Sistemas Sostenibles de Producción Agropecuaria (Cipav) y la Universidad de la Amazonia, demostró que usar aves en ganadería proporciona mayor productividad y ayuda a controlar plagas.
Este manual plantea que las mejores biosensoras de la salud en la ganadería son las aves y por sus beneficios en la producción y el control de plagas que afecta a los bovinos.
Estrategias como cercas vivas y mayor arborización regeneran la actividad natural y, a la vez, mejoran la productividad. El principal reto de la sostenibilidad es que los árboles estén asociados, no de forma dispersa, crear hábitats biodiversos, corredores de conectividad para tener más ecosistemas.
“Teníamos el estigma de que los sistemas silvopastoriles eran costosos, pero no es así, hemos llegado a las comunidades vía asociación y hemos manejado mejor las fuentes de recursos. Las comunidades organizadas facilitan la gestión”, comentó Manuel Gómez Vivas, director del programa ganadería Colombiana Sostenible de Fedegan.
Andrés Felipe Zuluaga, de TNC, dijo que “la alianza institucional seleccionó 178 predios y, al realizar su debido estudio, durante 32 días consecutivos encontró 522 aves. Son cinco centenares de individuos que se convierten en eco indicadores de la naturaleza y de la salud animal”.
Resaltó que la región de la Orinoquia en Colombia es considerada una zona especial para la conservación de paisajes debido a su gran diversidad ecológica. Se han identificado alrededor de 400 especies de pastos, pero los ganaderos solo utilizan cinco de ellas, lo que puede tener un impacto negativo en la biodiversidad de la región, según Fedegán.
La protección de la biodiversidad es un deber de los ganaderos en Colombia, ya que el país es el segundo más biodiverso del mundo, dijeron desde Fedegan.
El objetivo de este manual es diseminar prácticas sostenibles que promuevan la conservación de las aves y la biodiversidad, al mismo tiempo que integran beneficios para los ganaderos. En el manual se describen cinco capítulos y un anexo con acciones que se pueden implementar para conservar la biodiversidad en las fincas ganaderas, tales como la conectividad de fincas, corredores biológicos y la vegetación ribereña.
Además, el manual establece la transición de la ganadería extensiva a la sostenible, proporcionando herramientas para hacerlo, desde el estudio inicial del predio hasta la adecuación de suelos, cercas vivas, bosques y protección del agua y humedales. También se suministran los pasos a seguir para la debida restauración, la planificación y la implementación de diferentes especies arbóreas para convertir el predio en un área productiva, rentable y de conservación forestal y avifauna.
El propósito de Audubon es promover la conservación de las aves y su hábitat, y contrarrestar la extinción de las especies. Con la pérdida de 2,5 millones de aves migratorias desde 1950, es importante que los ganaderos comprendan la importancia de la conservación de la biodiversidad y su papel en ella. La implementación de prácticas sostenibles en la ganadería puede ser una herramienta importante para la conservación de la biodiversidad y las aves.
“Invitamos a pajarear, es decir, a concretar citas con aves, a conocer cuáles son las herramientas y aplicaciones que se pueden descargar en celulares para escuchar cantos de aves y educar el oído para identificar los sitios de las aves y familiarizarse con ellas”, comentó.