Estas son las opciones orgánicas más eficientes para que aprenda a fertilizar mejor
El ICA otorgó el primer registro de abono orgánico con composición de hoja de coca en el país, como parte de la política del Gobierno nacional de promover esta planta para usos lícitos.
Los productores del campo disponen de varias alternativas para elaborar materia orgánica indispensable para mantener la fertilidad del suelo, como el compostaje, el humus de lombriz, estiércoles de animales, los ácidos húmicos y el abono verde.
El estiércol es un abono natural y al ser rico en nitrógeno, se recomienda usarlo ya maduro sin miedo a quemar las plantas, ya que en su versión fresca puede ser abrasivo. En este caso se trata de dejarlo reposar hasta que desaparece el olor intenso a amoniaco.
El compostaje es el proceso aerobio de degradación de materia orgánica, con aumento de temperatura de forma controlada; se realiza por acción de microorganismos en presencia de aire para generar el abono orgánico llamado compost. Se obtiene de cáscaras de huevo, restos de verduras y frutas, residuos de origen animal; follaje, tallos frescos y hojas secas.
El humus es el resultado de un proceso de compostaje sólido, en el que intervienen activamente lombrices rojas californianas detritívoras que degradan elementos orgánicos, en su mayoría de origen vegetal, para producir un compuesto rico en minerales.
El abono verde se obtiene de plantas que se siembran y cultivan expresamente para voltearlas e incorporarlas al suelo como material nutriente. Por ejemplo, alfalfa, consuelda o trébol que, además de aportar la materia vegetal, fijan el nitrógeno del aire y lo devuelven a la tierra.
Según Heliodoro Argüello, biólogo PhD en sistemas de producción y catedrático pensionado de la Universidad Nacional, “los agricultores deben conocer que pueden producir unos componentes orgánicos que sirven como acondicionadores del suelo, pero no son realmente fertilizantes, los cuales ayudan para que las plantas puedan aprovechar mejor la Capacidad de Intercambio Catiónico, CIC”.
Es el caso, del compost, que es una materia orgánica altamente descompuesta originada ya sea de productos vegetales o animales (estiércol), el cual, al tener un alto contenido de carbono y al ser aplicado en el suelo, sirve para que se aumente de manera fácil el intercambio catiónico, indispensable para que las plantas tomen los minerales que están en la superficie del suelo.
Otro componente orgánico son los ácidos húmicos, que se obtienen de la descomposición de los vegetales, los cuales son importantes para elevar la CIC
Entre las novedades recientes que se han registrado en el tema de los fertilizantes orgánicos, está el registró que otorgó el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, al abono con composición de hoja de coca, cultivo muy estigmatizado. “Este hecho marca un hito para la desestigmatización de la hoja de coca, ya que evidencia que se puede utilizar para fines distintos a los ilícitos, como es el caso de los abonos orgánicos, lo cual se enmarca en la nueva Política Nacional Antidrogas del Gobierno del Cambio”, señala Juan Fernando Roa Ortiz, gerente general del ICA.
“Con el acopio y recolección de la hoja de coca como materia prima para la producción de fertilizantes como insumo aportamos al campo”, expresó Juan Fernando Roa, Gerente general del ICA.
EL DATO
20% es la producción nacional de abono orgánico, según las últimas cifras de fedeorgánicos
“Los agricultores deben conocer que se pueden producir unos componentes orgánicos que sirven como acondicionadores de suelo”, expresó heliodoro Argüello, Biólogo PhDen sistemas de producción.