Estos son algunos aspectos importantes para medir y corregir el pH de sus cultivos
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Estos son algunos aspectos importantes para medir y corregir el pH de sus cultivos

Esta variable del suelo se mide en una escala de 0 a 14, en el intervalo entre 5.5 y 6.5 es en el que hay una mayor disponibilidad de nutrientes
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Un nivel incorrecto en el pH del suelo de los cultivos puede afectar considerablemente el crecimiento de las plantas. Influye directamente en la absorción de los nutrientes del suelo, así como en muchos procesos químicos que se producen en este. Un conocimiento adecuado sobre su medición y corrección puede ser fundamental para obtener una mayor eficiencia de los cultivos.

Agronegocios conversó con Jairo Cuervo, profesor asociado de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional, sobre algunos aspectos técnicos para poder realizar la medición y corrección del pH de los suelos.

"El pH es un factor que indica el grado de acidez. En el caso de los suelos, este puede ser ácido o básico". Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), es el indicador principal en la disponibilidad de nutrientes para las plantas, influyendo en la solubilidad y en algunos contaminantes inorgánicos presentes en el suelo.

"Se mide en una escala de 0 a 14. En el intervalo de 0 a 7 se considera como un pH ácido, y en el intervalo de 7 a 14 es un pH básico. La mayor disponibilidad de nutrientes se encuentra en el intervalo de 5,5 a 6,5", explicó Cuervo.

Los suelos ácidos están asociados con un número de toxicidades (aluminio) y deficiencias (molibdeno) y otras condiciones restringentes para las plantas. Los pH alcalinos o básicos presentan un exceso de sodio y baja disponibilidad de hierro o manganeso.

Para corregir los niveles de pH se utiliza "un procedimiento de encalado o aplicación de calcio. Se pueden usar compuestos como el hidróxido de calcio", dijo.

Este procedimiento permite incrementar la disponibilidad de nutrientes en el suelo, en especial los niveles de calcio y magnesio, neutralizando el aluminio y manganeso. Respecto a su aplicación, el compuesto debe ser incorporado al suelo con suficiente antelación a la siembra. No aplique más de cuatro o cinco toneladas de una sola vez, ya que pueden producirse efectos de desbalance de bases.

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