El aceite de cacay llega a Italia para una de las ferias de emprendimiento más grandes
La región del Amazonas es un espacio que, por su diversidad en fauna y flora, ofrece un territorio lleno de oportunidades para nuevos descubrimientos. Colombia es un país privilegiado por tener 483.163 kilómetros cuadrados de la Amazonía, ofreciendo materia prima para la innovación y creación de nuevos productos que no se pueden encontrar en otra parte del mundo.
El Instituto Amazónico de Investigaciones Científicas, Sinchi, estima que en el Amazonas hay 3.798 especies de fauna y 17.531 de flora. Entre esta gran variedad se encuentra el cacay. Esta una planta que, además de otras como el andiroba o copoazú, ofrece una oportunidad para el mundo de la producción biocosmética.
Este es un árbol endémico que puede llegar a medir hasta 40 metros de altura y también se usa para producir nueces. Ahora bien, ElideBio, es la compañía encargada de destacar la capacidad que tiene esta planta en el sector de la cosmética a nivel internacional. Pues sus productos hechos a base de aceite de cacay tendrán la oportunidad de viajar a Milán, Italia.
Este viaje se dará en le marco de la feria emprendedora más grande del país ubicado en el sur de Europa. En el evento, que se realizará del 30 de noviembre al 8 de diciembre, participarán marcas de cosméticos y artesanías.
Marisol Martínez, cofundadora de ElideBio, se refirió al producto amazónico como una fuente de grandes beneficios para el uso humano.
“Amacay es nuestro aceita facial anti-edad, que combina el aceite de las semillas del Cacay con innovadoras fragancias logradas a partir de ingredientes de origen natural. Es especial también por su aroma singular, con notas aciduladas: dulces y ácidas al mismo tiempo. Amacay hidrata la piel, reduce arrugas y aporta luminosidad, elasticidad y firmeza al rostro sin dejar sensación grasa. Es natural, sin químicos, ni conservantes, ni fragancias artificiales y apto para todo tipo de piel. También puede ser usado en el pelo o en cualquier parte del cuerpo. Bastan de dos a cuatro gotas diarias para ver reflejados los beneficios del aceite Amacay”, dijo.
Hay que destacar la labor que tienen las comunidades autóctonas del país para la elaboración de este producto. En la región de Putumayo, los indígenas se encargan de recoger y clasificar las nueces apropiadas para el aceite, generando algunos ingresos y promoviendo la conservación del Amazonas.