Aceite de romero podría ser una alternativa para los productores
El aceite esencia de romero podría ser la solución para los agricultores en guasca de Cundinamarca y otras regiones, que en épocas de baja demanda de este cultivo (abril y septiembre) ven disminuidos sus ingresos.
La producción de este tipo de aceite es una de las iniciativas del grupo de investigación Sistemas Integrados de Producción Agrícola y Forestal (Sipaf) de la Universidad Nacional, con la que se busca, precisamente, mejorar las condiciones de los agricultores en guasca.
“Varios de los 25 productores con los que trabajamos en guasca elaboran productos a partir del romero, por lo que una de nuestras finalidades es aumentar la presencia de estos compuestos a partir de diversos procedimientos ligados a un adecuado proceso de fertilización y riego”, explicó el ingeniero agrónomo de la Universidad, Javier Leonardo Rodríguez.
En lo que el grupo de investigaciones trabaja es en la evaluación de las características del aceite de romero en las distintas zonas y sus diferentes maneras de producirlo, puesto que a pesar de estar situados en mismas regiones, las condiciones ambientales varían considerablemente.
“Mientras que algunos suelos presentan condiciones de acidez muy elevada, que suelen ser relativas, los niveles de precipitaciones o lluvias también pueden cambiar entre uno y otro terreno”, sostuvo.
El romero es un arbusto que se produce sobre camas dispuestas a 40 centímetros del suelo. Sin embargo, en algunos predios está asociado con diversos tipos de hortalizas (lechuga, acelga, espinaca o cebolla).
De acuerdo con la investigación, con el uso de un destilador por arrastre de vapor se obtiene el aceite que luego se debe separar del agua con un embudo de vidrio.
Rodríguez indicó que la extracción se efectúa cuando el vapor de agua entra en contacto con el material vegetal y libera la esencia, para luego condensarla. Se trata de un procedimiento que no demanda altos niveles de tecnificación.
Una vez separado, el aceite esencial de romero se envasa en recipientes color ámbar que se refrigeran a una temperatura de 4°C.
Un kilo de este aceite cuesta en el mercado entre US$150 y US$180.