Un dulce triunfo ha logrado la empresa de maní con sabor a café en Estados Unidos
Una fusión de sabores nacida en las montañas de Neira, Caldas, en Colombia, ha ganado popularidad desde su comienzo en 2017. Bajo la dirección de su fundador, José Gregorio de los Ríos, este producto artesanal pasó de ser una idea a convertirse en un emprendimiento exitoso en todo el mercado nacional e internacional.
Gregorio empezó en el mercado fabricando maní dulce en la cocina de su casa. Su costumbre de merendar café con maní por las tardes y el sueño de fusionar ambos sabores lo motivaron a tal punto de poder materializarlo. Luego de varios intentos, nació el maní con sabor a café, un producto que se ha convertido en la insignia de su emprendimiento.
La distribución inicia en una moto por parte de Gregorio, haciendo sus primeras ventas en las zonas turísticas de Fresno, Tolima; así como en el Eje Cafetero.
“Inicialmente, las ventas se limitaban a las calles de Manizales y Neira, con 80 a 100 docenas mensuales. A medida que el producto ganaba popularidad, me asocié con quien creyó en el potencial de mi negocio, permitiendo una rápida expansión de la marca”, expresó el emprendedor.
Hoy, la capacidad de producción ha aumentado a 1.200 docenas diarias, con distribuidores presentes en más de 17 departamentos y una expansión internacional que incluye la apertura de mercados en la Florida, Estados Unidos, desde abril de 2023.
“Ya tenemos distribución en Miami y Nueva York, adicionalmente estamos certificados por la FDA de Estados Unidos. Fue un proceso lento pero ya exportamos una tonelada mensual”, añadió.
Con la ambición de convertirse en el fabricante líder en ambos países para 2027, el equipo de Maní con Sabor a Café busca enfocarse en productos de calidad a precios competitivos, manteniendo a su equipo compuesto principalmente por madres cabezas de hogar de Neira.
“Esta iniciativa surgió en vista de muchas necesidades en el pueblo, ya que no hay muchas fuentes de empleo formal consolidadas”, dice.
La materia prima utilizada, incluido el maní de países como Brasil, Estados Unidos, Nicaragua, Perú y Paraguay, pretende garantizar la excelencia en cada bocado. “Además, el uso del café colombiano, respaldado por la vibrante industria cafetera, refleja nuestro compromiso con el desarrollo nacional”, agregó.
Se presenta en empaques de 60 g y 12 unidades, queriendo diferenciar su sabor para los amantes del café y los frutos secos.
“Con la versatilidad de ser un snack perfecto para cualquier ocasión, este producto artesanal es ideal para compartir en reuniones familiares, eventos con amigos o simplemente disfrutar en el trabajo”, concluyó.