Las herramientas y técnicas necesarias para adiestrar a un perro durante su adultez

La frase que dice perro viejo ladra echado, para explicar que ya lo sabe todo y no necesita aprender más, es una dicho del argot popular que va en contravía de recientes investigaciones científicas que revelan que los perros viejos, sí aprenden.

Según el médico veterinario, zootecnista, Willington Ruiz Chipo, existen estudios que revelan que por supuesto los perros viejos sí aprenden, tras señalar que todos los cerebros evolucionados a cualquier edad pueden aprender. “Mientras exista corteza cerebral en un ser vivo, este tiene la capacidad de aprender”, añade el médico veterinario.

Al igual que sucede con los humanos, los perros tienen la capacidad de aprender. Sin embargo, en algunos casos los procesos podrían ser un poco más lentos. Esto va de acuerdo al estado de salud del canino, de su entorno y el ambiente emocional.

Los perros adultos son más sensibles al aprendizaje, dado que ya no tienen el vigor de un cachorro, y por ello, pueden poner su mayor atención. Solo los perros que presenten alguna patología en la corteza cerebral, como el síndrome de eficiencia cognitiva, empiezan a olvidar, y esto se evidencia por ejemplo cuando empiezan a caminar en círculos, no controlan esfínteres, o tienen períodos de sueño interrumpido, dijo Ruiz.

Una investigación realizada en la U. de Viena, en la que se estudió el cerebro de una de las razas más inteligentes caninas, como el Border Collie, reveló que los perros adultos son más flexibles al aprendizaje y que cuanto más viejo es el canino se desempeñan mejor, y que así como los humanos los perros siempre están dispuestos al aprendizaje por su misma estructura cerebral.

El médico veterinario, David Rosas, sostiene que los perros adultos son más fáciles de reeducar porque no tienen la energía de un cachorro. “Al igual que las personas adultas que tienen mucha más experiencia para perseverar, los perros viejos son tercos a la hora de aprender nuevas cosas. Lo importante es la repetición, la paciencia y el objetivo en lo que se busca en el animal”.

Hoy en día, existe un mayor interés por estudiar el razonamiento lógico del perro y la capacidad de memoria del largo plazo, y también su proceso de envejecimiento, dado que siempre mientras exista corteza cerebral, en condiciones saludables, los perros pueden aprender cualquier cosa que su dueño o entrenador quiera enseñarles.

Rosas, aseguró que para enseñar nuevas cosas a un perro, se pueden aplicar varias formas: la terapia conductual, de adiestramiento, farmacológica, homeopática o terapia quirúrgica.

1) Entorno influye en aprendizaje

Escoja un ambiente propicio para el entrenamiento, dado que el entorno influye en el estado anímico del perro y esto permitirá que pueda aprender nuevas cosas de mejor manera.

2) Educar en tiempos cortos

Comience el entrenamiento con espacios de tiempo breves para despertar el interés del canino y por ende su aprendizaje ya que la concentración del perro tal como sucede con los humanos, es limitada.

3) La razas influyen

Cree un estímulo por recompensa y tenga en cuenta la raza ya que hay perros aprenden más rápido que otros, como los Labrador, Border Collier y el Pastor Alemán; consideradas las razas más inteligentes.

4) Consultar con el veterinario

Realice un estudio psicológico, emocional y de salud del animal, antes de iniciar cualquier nuevo aprendizaje o práctica. Por eso es fundamental consultar con el veterinario, un entrenador o un etólogo.

5) Premiar por cada logro

Estimule a su perro adulto, bríndele bocadillos que le gusten para incentivarlo por cada logro alcanzado. Por cada acción que realice se debe premiar también con un snack de su preferencia.