La rabia es prevenible, siempre y cuando su mascota tenga las vacunas al día
Las mascotas, en especial perros y gatos han pasado de ser un animal de compañía a convertirse en un integrante de la familia.
La Encuesta Nacional de Presupuestos de los Hogares, realizada por el Dane, demostró que en el país hay cerca de un millón de animales en estado de abandono, cifra que está creciendo. También registró el aumento de mascotas que habitan en los hogares colombianos, pasando de 830.000 a más de dos millones entre 2006 y 2017, un crecimiento de 60%.
Lo anterior, prueba que si bien las mascotas son seres que ocupan espacios significativos en los hogares de los colombianos, los propietarios tienen el deber de darles calidad de vida. Una mascota no es solo para jugar o exhibirla en redes sociales, tenerla implica velar por su bienestar: alimentarla, bañarla, protegerla, desparacitarla y, sobre todo, tener su carnet de vacunación al día.
La legislación colombiana indica que los animales deben ser vacunados una vez al año en contra de la rabia. Sin embargo, según la Sociedad Mundial para la Protección de los Animales, cerca de 15% de los propietarios no han vacunado a sus mascotas en el último año. Las vacunas son muy importantes para ellos, pues evitan que se contagien de virus a los que son vulnerables.
La rabia es uno de esos virus. Si bien no se tienen casos recientes en Colombia, pues el último fue en 2017, es un tema de largo aliento. Por ello, farmacéuticas como Boehringer Ingelheim, propenden por hacer campañas para la prevención de esta enfermedad que , según ellos, cobra más de 59.000 muertes humanas en el mundo.
Identifique si su mascota está contagiada si nota alguno de las siguientes anomalías: cambios en su conducta, atacar sin ser provocado, salivación abundante, evita tomar agua o alucinaciones y excitaciones alternadas con períodos de calma.
Magnolia Gálvez, gerente de Producto de Salud Animal en Boehringer Ingelheim, asegura que “una vez el animal es diagnosticado con rabia, es letal para él. Pues se convierte en un riesgo de transmisión para animales y humanos”. Considera que en Colombia hay un grado de conciencia alto en prevención y vacunación antirrábica, añade que “esto ha sido beneficioso porque se han reducido de forma importante los casos, en el país no hay casos recientes, salvo el de 2017”.