La anemia animal y los males comunes en una mascotas de casa
Según registros de la consultora PetFamily, en América Latina las visitas al veterinario crecieron más de 35% el año pasado. La cifra es buena si se tiene en cuenta que demuestra que pese a las enfermedades de las mascotas, sus dueños están más enfocados en atenderlas con especialistas. De hecho, la misma firma resaltó que en países como Colombia y Perú, por cada 100 casos entre urgencias y atenciones no vitales, 70 fueron atendidos a tiempo y eso generó un buen efecto en perros y gatos.
El problema es cuando los dueños no conocen las implicaciones de ciertas enfermedades. Por ello, verlos afectados anímicamente, inapetentes o con algún signo de anomalía en su cognición genera preocupación e incertidumbre.
Uno de los padecimientos más preocupantes en los animales es la anemia canina. Los expertos consultados por Agronegocios consideran que no es correcto mirarlo como una enfermedad pues, sin duda, es un signo clínico.
En criterio del médico César Augusto Cabrejo Saavedra, coordinador de la clínica de pequeños animales de la Universidad de la Salle, la anemia canina no existe, “pero sí es un signo clínico”.
Este concepto lo amplió el médico Javier Rivas, especialista en odontología veterinaria y doctor en la misma área. El experto dejó en claro que la anemia no es una enfermedad como tal, sino que puede ser “consecuencia de una enfermedad más grande, los casos más comunes se producen por hemoparásitos que se desarrollan por garrapatas, y por eso, cuando viajan a tierra caliente insistimos en que los animales se apliquen y utilicen una serie de productos”.
“Como los glóbulos rojos llevan el oxígeno, se comprometen especialmente los riñones y estas complicaciones renales ponen en alto riesgo la vida del paciente”, resaltó el doctor Rivas.
Teniendo en cuenta que la anemia es considerada más un signo que una enfermedad, los profesionales de la medicina veterinaria recuerdan que el hogar, con sus particularidades, es un espacio usual para que se presenten padecimientos o situaciones que comprometan la salud en las mascotas. El doctor Rivas, por ejemplo, recordó que lo más común son las intoxicaciones.
Ocurre que en algunas ocasiones las mascotas abren las gavetas. Allí encuentran productos y, en la dinámica, se produce la infesta de objetos extraños. Esta situación termina por lo general en cirugías.
De otro lado, el médico Cabrejo Saavedra remarcó que las piedras, monedas, alambres, agujas, entre otros, son los objetos extraños que, habitualmente, son consumidos por los caninos y felinos.
Pero también la alimentación que habitualmente se le suministra a la mascota juega un factor de deterioro en su estado de salud, especialmente cuando no se prepara ningún producto alimenticio acorde a sus necesidades. “Los animales que le damos con el tiempo comida casera lo sufren con el tiempo. Nadie le cocina al perro, le damos toda clase de productos condimentados que son muy pesados para ellos. Y con el tiempo causa un daño -lento- hasta que aparecen los problemas serios”, comentó Cabrejo.
Para el médico Cabrejo Saavedra, las enfermedades en las mascotas, dentro del contexto del hogar, son variables y que se pueden desarrollar dependiendo a la edad, un aspecto muy importante.
“Por ejemplo, en cachorros se producen enfermedades gastrointestinales que pueden ser virales (rotavirus) y parasitarias”, señaló Cabrejo.
Y a medida que van creciendo las mascotas también cambia el tipo de enfermedad. En animales adultos se presentan mayores problemas como males crónicos de carácter renal; cambios que se van dando en cada estado de la vida.
Expertos también sugieren que en el caso de caninos se deben aumentar los chequeos médicos cuando tienen más de ocho años, pues las defensas son menores y son más débiles a contraer algún virus cuando salen a las calles.
En el caso de los felinos, que son más autónomos, se recomiendan dos visitas al médico por año después de que cumplan seis años; pues también requieren vigilancia constante por un profesional.