Reconocen por primera vez a un perro como miembro de una familia en Colombia
Luego de más de dos años de una demanda interpuesta por un hombre contra su expareja, en la que alegaba que la mujer no le dejaba ver de manera regular a su hija perruna, llamada Simona, el Tribunal Superior de Bogotá tomó la decisión de reconocerla como miembro de la familia.
La historia de esta expareja aterrizó en los juzgados el 28 de octubre de 2022, en la que el demandante quería regularidad en las visitas a Simona, por el vínculo presente con el animal. Mientras que la demandada alegaba que afectaba a la perra emocionalmente.
La decisión se tomó por un conflicto de competencias entre un juzgado civil y otro de familia de Bogotá, quienes no resolvieron la demanda interpuesta por el hombre tras la ruptura de la pareja a comienzos de 2021.
El Juzgado Tercero de Familia de Bogotá dijo el 6 de diciembre de 2022 que el caso no era de su competencia, puesto que no estaba en los artículos 21 y 22 del Código General del Proceso, por lo que dijeron que les correspondía a los jueces civiles del circuito.
En abril de 2023, la demanda quedó en el Juzgado 27 Civil del Circuito de Bogotá, el cual respondió hasta junio diciendo que los temas correspondían a jueces de familias.
“Los animales son sujetos de derecho, y su bienestar se puede ver afectado por la separación de la pareja, pues ahora hacen parte de la familia. Por lo tanto, ese juzgado propuso conflicto negativo de competencia ante el Tribunal Superior de Bogotá", emitió el juzgado.
Luego de conocer el caso, el Tribunal de Bogotá tomó la decisión por los vínculos que surgen entre seres sintientes, respecto a lo que confirma una familia multiespecie, no equiparando al humano con el animal, sino su integración a las familias.
Finalmente, el Tribunal procedió a determinar que la demanda deberá ser resulta por el Juzgado Tercero de Familia.