Conozca cómo cuidar la salud de los gatos durante las altas temperaturas de El Niño

Kiwoko, el mayor grupo de tiendas para el cuidado animal, juntó una serie de recomendaciones para que los gatos no sufran durante la temporada de calor. Los consejos recopilados se enfocan, principalmente, en la hidratación constante y mantener su espacio fresco.

Los gatos son muy sensibles, por lo que el calor veraniego les afecta más de lo que nos imaginamos. Ana Ramírez, directora técnica veterinaria de Kivet, la red de clínicas veterinarias de Kiwoko, asegura que, "se debe cuidar a los gatos al igual que al resto de los animales ante el aumento de las temperaturas y así, evitar golpes de calor u otros males. El cuidado debe estar centrado principalmente en la hidratación y el mantenimiento del espacio del animal con una temperatura adecuada".

Otra parte de cuidar a los felinos domésticos de las altas temperaturas es, "saber identificar cuando el gato está teniendo una reacción anómala frente el calor. Por ejemplo, cuando es excesiva la temperatura, pueden sufrir abundante salivación, lengua azulada y temblores. Hay que tener vigilancia constante con el animal y llevarlo de inmediato al veterinario para descartar cualquier riesgo. Lo normal, por el contrario, es que el animal se moverá de forma más lenta y pueda estar algo perezoso, lo que puede derivar en estrés", reiteró Ramírez.

Espacios con temperatura regulada

Dependiendo de dónde pase más tiempo el gato durante el día, hay que acoplar esos espacios. En exteriores se necesita añadir rincones con sombra para que el gato pueda resguardarse, teniendo en cuenta el cambio de posición del sol al paso de las horas. En interiores hay que echar las cortinas o bajar las persianas, siempre y cuando corra algo de aire. O bien, si hay ventilador o aire acondicionado, hay que recordar no llevar la temperatura a extremos.

Hidratación

A diferencia de los perros, los gatos no beben agua con la misma naturalidad, ya que su pasado salvaje les permitía ingerirla a través de las presas que cazaban. Así, es importante asegurarse de que el gato se esté hidratando, por lo que idealmente se debe dejar varios puntos de agua alrededor de su espacio y mantenerla fresca. Esto se puede lograr con cubos de hielo o bebedores especiales. De igual forma, les llama más la atención el agua en movimiento, por lo que los grifos y las fuentes pueden ser buena opción para ellos.

También, es necesario humedecer con cierta constancia las almohadillas de las patas del gato, especialmente tras algún paseo afuera. Con una toalla húmeda se les puede acariciar el pelaje para hacerlos sentir aún más frescos.

Alimentación

Como con cualquier ser vivo, la dieta es de suma relevancia para el bienestar. Siempre manteniendo los valores nutricionales que necesita el animal, durante el verano se pueden agregar más comidas húmedas y frescas que aporten a una correcta hidratación. Existen complementos como el helado para gatos hechos naturalmente que ayudan a regular su temperatura corporal.