Cáncer transmisible en perros callejeros, enfermedad que dura años hasta causar la muerte
El cáncer en caninos no es un concepto nuevo en Colombia, esta versión tradicional solo afecta a una serie de células presente en algunos órganos, generando tumores. En cambio, la variación contagiosa, llamada tumor venéreo transmisible canino (TVT), altera los genitales externos, provocando síntomas dolorosos para el animal y, en algunos casos, la muerte.
Algunos síntomas identificables son la producción de una secreción mucosa con sangre eventual, abultamientos en la zona y presencia de una masa anormal, olor irregular, lamido excesivo de los genitales y, dependiendo del nivel de vida del cáncer transmisible, dificultad para orinar.
Según la Universidad Nacional de Colombia (Unal), los casos más investigados están en Australia, pero existen reportes de TVT contagioso en más de 90 países, entre ellos Colombia.
El cáncer contagioso se presenta principalmente en perros callejeros, lo cual dificulta llevar un registro de los casos totales. Según un estudio realizado por Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (Idpyba), solo en Bogotá se estima que hay 66.467 perros deambulantes, hablando de cantidad, y hay una densidad de 165 animales por kilómetro cuadrado.
La Unal afirma que esta enfermedad tiene mayor incidencia en la región Andina, seguida del Pacífico y el Amazonas.
“Algunas investigaciones han señalado que el cáncer transmisible en perros se describe como una enfermedad muy antigua que probablemente ha estado presente desde hace más de 4.000 años, y se cree que comenzó por una célula del sistema inmune que se convirtió en cancerígena y que se siguió propagando incluso después de la muerte de su huésped”, explicó el médico veterinario Fabián Danilo López Valbuena, estudiante de la Maestría en Salud Animal de la Universidad Nacional de Colombia (Unal), en entrevista con la Agencia Unal.
“Esta es una enfermedad que se transmite especialmente mediante vía sexual, y que encuentra en este acto una propagación ideal, puesto que en los perros la cópula dura bastante tiempo y va generando microlesiones que terminan facilitando el contagio”, agregó el experto.
También explicó que esta masa que se presenta tiene características malignas bajo el microscopio, la cual palpa una capacidad para persistir durante años sin un avance perceptible. “Este tumor transmisible parece priorizar la supervivencia sobre la agresividad hacia el huésped".
El sistema inmune ante la presencia del TVT no reporta el daño, permitiendo que la célula, que presenta fallas, siga su trayecto, se replique y multiplique.
“Lo desconcertante del cáncer transmisible es que la célula en mal estado se transporta a otro individuo en el que no es común que transite, evitando que los sistemas inmunes de este nuevo lugar lo detengan, o sea, las células vivas se transmiten no solo a los órganos de una persona (metástasis), sino entre individuos”, aclaró el médico veterinario.
Según la Unal existen nueve tipos de cáncer transmisible, seis de ellos detectados en moluscos marinos, dos en el llamado demonio de Tasmania y solo uno en perros. Aunque actualmente la mortalidad es baja, cuando se encontró en los demonios de Tasmania, su porcentaje de letalidad era muy alto, lo que deja ver una evolución de la enfermedad.
El experto planteó una problemática por desconocimiento, es decir, que existen más preguntas que respuestas en el TVT, como por ejemplo ¿cuáles genes están involucrados en este tipo de adaptación de la enfermedad?, ¿cuáles son los factores ambientales que motivan este tipo de cambios en el cáncer?, y ¿hasta qué punto es posible que un tipo de cáncer en humanos se convierta en transmisible?
“Algunos perros con este tipo de cáncer no responden a la quimioterapia con el medicamento vincristina, comúnmente utilizado en esta enfermedad. Es interesante destacar que en ocasiones la regresión tumoral ocurre sin necesidad de quimioterapia, lo cual plantea interrogantes sobre la naturaleza de la enfermedad”, concluyó.