Aprenda a prevenir, identificar y tratar los síntomas de la mastitis en sus caninas

Los perros constantemente están en riesgo de contraer enfermedades o desarrollar patologías congénitas que no solo le provocan dolor físico al animal y pérdida de capacidades motoras, sino que generan una gran preocupación en el dueño o tutor de la mascota.

Hay enfermedades transitorias que con el paso de los días se van sin dejar rastro, hay algunas que se contraen por malos cuidados que pueden llegar a agravar una patología preexistente, por lo que se desarrolla de manera más rápida y temprana e incluso incidiendo a que pase en un futuro. Esto suele ocurrir por el desconocimiento de los dueños a las prácticas correctas que se deben emplear en las mascotas, dependiendo de su raza y aspectos fisiológicos.

La mastitis es una inflamación de la glándula mamaria que puede estar producida por agentes infecciosos o por problemashormonales relacionados con un desequilibrio del sistema endocrino, que es un conjunto de glándulas y órganos que elaboran hormonas y las liberan directamente en la sangre, que puede generar este tipo de patologías.

Esta afección es muy dolorosa y puede poner en riesgo la vida del paciente. “Si llegan a un número de la colección de bacterias demasiado alta, puede llegar la enfermedad hasta el sistema vascular del paciente, generando una septicemia, que es la presencia de bacterias en la sangre y una probable muerte de la canina; además, si tiene cachorros y toman esa leche, se van a enfermar las crías”, comentó Juan Carlos Morales Pérez, médico veterinario de la Universidad Antonio Nariño y docente de la Facultad de Medicina Veterinaria.

La causa de la mastitis tiene distintos orígenes, “generalmente se relacionan con las crías o el exceso de progesterona en el animal. Primero hay animales que en su gestación y en su alumbramiento, tienen algunos cachorritos que empiezan a tomar leche de las glándulas mamarias, en ese proceso existe la probabilidad de que en el pezón ingresen bacterias que van a contaminar la glándula y se va a ocasionar colecciones de estas bacterias y producir inflamación y por último la mastitis”, explicó Morales Pérez.

Otra causa es que hormonalmente producen excesos de progesterona, que es la hormona sexual que tiene como función preparar el útero para la recepción del huevo fecundado, como cuando hay pseudo preñez, es decir, un mecanismo endocrinológico; se empiezan a producir excesos de progesterona y se comienza a llenar la glándula mamaria de leche, que no se extrae y puede haber mastitis.

“La otra causa se da cuando se pone a planificar la hembra para que no vaya a tener el cachorrito, le ponen productos que vienen con progesterona, que van a generar el mismo inconveniente de producción de leche que no se extrae y por ende se puede contaminar esa leche y esa glándula mamaria puede generar mastitis”, agregó el experto.

La forma de prevenir esta afección es la esterilización porque corta de raíz el problema, ya que, al retirar los ovarios, no va a ver cuerpo lúteo, ni progesterona, no se va a estimular la unión de las mamarias para que produzca leche, no va a haber una retroalimentación del sistema endocrinológico, cortando el ciclo completo.

“Cuando tenemos cachorros hay que procurar que consuman toda la leche y mantener limpia la zona donde está la mamá que no esté contaminada. Lo ideal es lavar muy bien esas glándulas mamarias, si se puede en casa, limpiarlas antes de que los cachorros coman, por lo menos una vez al día con pañitos húmedos libres de alcohol. Si el propietario es de los que inyecta el animal para que planifique, es mejor que no lo haga, sino mandarlos a esterilizar. Ya cuando tenemos el problema, hay que ir donde un médico veterinario que lo diagnostique y que realice un protocolo completo de antibiótico terapia, manejo del dolor y manejo sobre esa glándula mamaria con la finalidad de evitar esa mastitis”, comentó Morales.

La mastitis se puede identificar si está en pseudo preñez, la hembra canina va a empezar a hacer nidos, esconderse y va a llevar juguetes, se pondrá consentida y va a cambiar totalmente su comportamiento habitual, la glándula mamaria se hará más grande y con producción de leche, esta es una señal de alerta.

Se puede reconocer si en una de las glándulas mamarias hay inflamación y enrojecimiento, está más caliente de lo normal, empieza a producir sustancias serosanguinolentas, como agua con sangre en lugar de leche, y empieza a botar una sustancia cremosa diferente a la leche por la mama.

“Hay un punto en el que está tan afectada esa glándula que probablemente hay que retirarlo, pero habitualmente no se llega hasta allá. Eso depende de la velocidad con la que el propietario lleve a su mascota a un centro veterinario con un personal calificado, me refiero a un médico veterinario zootecnista con matrícula profesional. También recomiendo esterilizar, ayuda a que no vayamos a tener un componente hormonal que genere mastitis”, concluyó el experto.