La crítica se rinde al coraje y valentía de Juan de Castilla, que herido con dos cornadas, se lució en Las Ventas
En las últimas horas, específicamente ayer martes, el torero colombiano Juan de Castilla resultó herido en la Plaza de Toros de Las Ventas, dentro de la celebración del decimosexto festejo de la feria de San Isidro. Su pronóstico, tras ser corneado, es reservado.
La dura situación de Castilla se presentó en el momento en que lidiaba al tercer toro de la tarde, un ejemplar de la ganadería Dolores Aguirre. El animal hizo un extraño movimiento, lo desarmó y lo empitonó por la espalda y el vientre.
De Castilla recibió dos heridas por asta de toro: una de gravedad en la espalda, con una trayectoria de 15 centímetros desde la cresta ilíaca posterior hasta la espina ilíaca anterosuperior, y una segunda, de carácter superficial, en el pene.
Uno de los detalles que más llamó la atención es que el antioqueño Juan de Castilla finalizó la lidia del tercer toro antes de irse a la enfermería tras la petición del público asistente a la plaza madrileña. Este acto fue resaltado por varios de los medios especializados españoles, que resaltaron su valentía, entrega y amor por la tauromaquia. Uno de ellos el periódico 'El Debate', que título su crónica de la faena como 'Juan de Castilla, torero colombiano con pantalones', escrita por Andrés Amorós.
"El colombiano Juan de Castilla se entrega totalmente, sufre un percance y roza el triunfo(...) El colombiano Juan de Castilla impresionó al público de Las Ventas por su valor sereno, auténtico. Su biografía tiene perfiles novelescos. Siendo ya matador, en Madrid, lo ha compaginado con su trabajo de repartidor, en una empresa de paquetería. Indultó un toro en Bogotá, alternando con Roca Rey", escribieron sobre él.
Amorós, en su crónica, agregó que: "Esta tarde, muestra su disposición desde el primer quite. El tercero sale abanto, no hace buena pelea en varas. Después de doblarse con él, le da distancia: el toro no obedece, lo arrolla y, en el ruedo, lo persigue con saña. Parece claro que ha sufrido un pitonazo en sus partes. Vuelve a la cara del toro con un pantalón corto gris, por encima del traje de luces: una escena que antes era frecuente pero hoy ya no lo es. Con el público entregado a su valor, se pelea a toma y daca con un toro de evidente peligro, en un trasteo de gran emoción. Se entrega al matar, logra la estocada pero el Presidente no concede la oreja: da la vuelta al ruedo y pasa a la enfermería".
Y cierra, resaltando el valor del antioqueño, "Brinda Juan al público, que está con él: el toro sale huyendo pero él lo persigue, aprovecha su huida para dibujar algún natural. La entrega del diestro es absoluta pero el toro se va a tablas. Allí, tragando mucho, le arranca algunos muletazos. A la segunda, deja media atravesada, que basta. Sin triunfar, Juan de Castilla se ha ganado el respeto del público de Las Ventas. Colombia tiene un torero de gran corazón".
Mientras que El Mundo tituló: 'La encarnizada guerra de un heroico Juan de Castilla con un toro de enfermería en Las Ventas'. Escribieron que "el colombiano, herido, da la única vuelta al ruedo frente a la mansa y dura escalera de Dolores Aguirre, mal presentada y mala".
En tanto que 'Mundotoro' se refirió a él como "Juan de Castilla llegó a Madrid con la firme intención de cambiar su futuro. Y solo cuando uno está dispuesto a perderlo todo, está en condiciones de ganarlo todo. El manso tercero había sido protestado por sus destartaladas hechuras y su justo remate. De buenas a primeras, y después de mostrar su mansedumbre, Juan de Castilla dio distancia para torear sobre la diestra. El toro vino directamente al pecho como un obús y al intentar librar el aprieto, el pitón le golpeó en el hombro, quedando el colombiano a merced en el suelo. Violento y angustiosos fueron los segundos posteriores, con el toro pegando cornadas y levantándole del suelo en varias ocasiones. Buscó Juan de Castilla un vaquero con el que tapar sus nobles partes -heridas-, aunque con una cornada en la espalda que pasó totalmente inadvertida. Ni un gesto, en una auténtica gesta".
"Se fajó Juan de Castilla, de valor seco y verdad entregada, con las embestidas descompuestas del astado. Más a la defensiva, que a la verdadera entrega. Se mantuvo firme y anclado en la arena hasta que consiguió dominar a la furia en una faena de emoción. En la bocana de toriles miraba César Rincón a su paisano, que estaba ganándose el respeto, una vez más, de Madrid", agregó 'Mundotoro'.
Otro medio que destacó su valor fue el de 'Aplausos', que tituló: 'La hombría de Juan de Castilla entre la dureza de Dolores Aguirre en Madrid'; y escribió: "Luego, tras ser atendido de esas lesiones, Juan de Castilla regresó de la enfermería para irse a recibir a portagayola al inmenso sexto de 670 kilos. El colombiano salvó la papeleta con solvencia y disposición. Un toro mal picado. En la muleta repuso, probó y pegó topetazos. Terminó rajándose. Pinchazo y media estocada tendida".
Juan de Castilla nació en Medellín el 7 de septiembre de 1994 y tomó la alternativa el 28 de enero de 2017 en la capital paisa con dos leyendas de la tauromaquia, con Enrique Ponce como padrino, y Andrés Roca Rey, como testigo.