Hay 22.406 hectáreas en el territorio nacional destinadas a la ganadería regenerativa
Con la ambiciosa meta trazada por el Gobierno Nacional de reducir las emisiones de Gases Efecto Invernadero (GEI) en 51% para 2030, prácticas como la ganadería regenerativa se hacen cada vez más imperiosas en un país como Colombia. Es por eso que, desde diferentes sectores productivos, se impulsa para ayudar a preservar los ecosistemas, producir alimentos más saludables y, por ende, mejorar la calidad de vida de los habitantes.
Y más cuando se tiene claro, que prácticas como la ganadería tradicional, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), genera más gases de efecto invernadero que el sector del transporte.
La ganadería regenerativa es un sistema de producción agroforestal amigable con las dinámicas de la naturaleza. Este proceso aplica prácticas de manejo sustentables, incrementa la productividad y reduce los costos de producción, promoviendo un mayor retorno sobre la inversión. Además, mejora la calidad de vida para los productores y sus colaboradores y permite obtener alimentos saludables y limpios para los consumidores.
Esta forma de ganadería previene y combate la deforestación y destrucción de los ecosistemas porque se enfoca en la regeneración de los suelos, uno de los aspectos más criticados de la práctica tradicional en el mundo.
Según el Instituto Alexander Von Humboldt, con datos a 2020, en Colombia hay 22.406 hectáreas destinadas a la ganadería regenerativa que comprenden 197 fincas a lo largo del territorio. Entre los principales departamentos en los que se desarrolla son: Antioquia, Meta, Sucre, Bolívar, Casanare, Vichada, Cesar, Cundinamarca, Santander, Magdalena, Caldas, Quindío y Valle del Cauca, entre otros.
De acuerdo con el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), en Colombia la población bovina, con datos de 2021, está distribuida en 633.408 predios y está compuesta por 27.293.390 animales.
Desde el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural se viene trabajando desde hace algunos años en el fomento de esta práctica en el país. El pasado 12 de febrero, una comitiva encabezada por el ministro Rodolfo Enrique Zea y una delegación del Consejo Directivo de la Corporación Colombia Internacional (CCI), realizaron una visita técnica al corregimiento Nueva Antioquia, municipio La Primavera (Vichada) para conocer lo que se viene haciendo en ese territorio, específicamente en la Hacienda San José.
Adriana Senior, presidente de la CCI, expresó que “gracias a la ganadería sostenible logramos regenerar los suelos, apostándole a la seguridad alimentaria del planeta con mejoramiento genético, logrando extensiones de tierra sin degradación, fuentes hídricas alimentadas con más reforestación y pastos no atados si no cuidados”.
El objetivo del Gobierno Nacional, a través de Minagricultura, es que cada vez se conozca mejor y se aplique una ganadería sostenible y rentable. Así se fortalece esta iniciativa basada en la conservación de la biodiversidad, los recursos naturales y en la recuperación de tierras degradadas transformando la genética para convertir al país en un gran productor de carne sin tener que incrementar los rebaños.
Ejemplos de producción con menos efectos ambientales
Un ejemplo de modelo de producción bajo el esquema de “ganadería regenerativa” es Carnes La Estrella, una empresa especializada en la distribución de productos cárnicos de alta calidad y saludables, cuyo negocio está fundamentado en un método que opera en pequeñas manadas y que se caracteriza por ser amigable con el medio ambiente, a la vez que busca brindar, al consumidor final, un producto más saludable y con alto con tenido proteínico.