Gobierno prepara ayudas en créditos para nuevas plantas de pulverización de leche
Uno de los principales dolores de cabeza de los productores del campo, e incluso de los propios industriales se da cuando la sobreoferta se toma los precios de los alimentos, generando choques entre los trabajadores en fincas y empresas procesadoras o comercializadoras. Y este problema ya se vive detrás de cada vaso de leche que hoy se sirve en el país.
La polémica empezó luego de que algunos productores señalaran a empresas de estar comprando “demasiada” leche importada. Pero más allá de eso, el problema de fondo comienza en que el consumo es de 18,2 millones de litros por día, y lo producido es casi de 20 millones.
En otros países lecheros como Reino Unido, Nueva Zelanda y Estados Unidos, además de tener subsidios a la producción, han acudido a pulverizar el líquido, lo que permite más tiempo de almacenamiento, especialmente cuando los inventarios bajan.
El obstáculo en Colombia es que hay menos de 10 plantas pulverizadoras, y abrir más, resulta costoso. “Tiene un proceso con consumo alto de energía, además de los gastos industriales, amortizar, mano de obra, etc”, dijo Roberto Ramírez, presidente de Demogan.
El ministro de Agricultura, Rodolfo Zea, luego de tener acercamientos con productores e industriales ya definió los primeros pasos para que la capacidad de pulverización sea mayor. El funcionario explicó que “se está estructurando una línea de crédito, con tasa subsidiada, que permita que se hagan inversiones en almacenamiento y pulverización de leche. Buscando que en épocas de abundancia como en el invierno, se pueda pulverizar leche y almacenar para ser utilizada en tiempos de verano que baja la producción de leche local”.
Equipos técnicos de ese ministerio ya trabajan en la estructuración de esas líneas de crédito las cuales se espera que estén listas entre uno y dos meses con Finagro. Además, “es un tema que se puede organizar, en conjunto con el Minagricultura para un subsidio, tendremos aún que estructurarla también con Bancoldex”, agregó el ministro de Comercio, José Manuel Restrepo.
Adicionalmente, los auxilios no solo están enfocados en ese tipo de plantas. “En coordinación con el Fondo de Estabilización de la Leche, pusimos a disposición de los productores un apoyo por $4.000 millones, de los cuales, $1.000 millones serán destinados para un incentivo a la exportación y $3.000 millones para la compra de excedentes”, agregó Zea.
En este último punto, el incentivo tiene la novedad que antes ya había uno de este tipo, pero enfocado en solo cinco departamentos productores, ahora será nacional.
Hasta el momento, estas completarían una serie de medidas para intervenir entre diferentes problemas que se han detectado en un sector del que dependen casi 400.000 productores de leche, es decir, más de 1 millón de familias campesinas.
“Desde la academia insistimos en que, si bien se dan pasos de este tipo, los retos que quedan están en temas como la misma informalidad, competitividad y balanza comercial”, añadió Román Bauer de América Natural.
En este último punto, la diferencia de exportaciones frente a importaciones es bastante marcada. Solo al corte de abril, entre leche en polvo, descremada, lactosueros, y quesos, entraron a Colombia 36.807 toneladas; mientras lo que salió del país fue poco más de 891 toneladas.
Finalmente, por las preocupaciones de la industria se pide mejorar la productividad, “desde el año 2000, los litros producidos por vaca solo han aumentado 8%, mientras que, en Brasil, por ejemplo, fue 72%”, concluyó Juan Bargans, presidente de Asoleche.