El hato ovino y caprino suma más de dos millones de cabezas en el territorio nacional
La mayor parte de las áreas montañosas del territorio nacional son adecuadas para la crianza de ovinos y caprinos. Estas ganaderías, que comenzaron como una tradición cultural y gastronómica, se han convertido hoy día en renglones económicos con gran proyección a nivel nacional, por las excelentes bondades para la obtención de productos variados como leche, carne y lana.
Según las cifras del ICA, el inventario ovino a nivel nacional es de 1,6 millones de cabezas, concentradas en la región Caribe (72,88%), región Andina (18,99%), Orinoquia (4,36%), Amazonia (2,03%) y, por último, la región Pacífica (1,76%). Estos animales se encuentran en manos de aproximadamente 110.000 productores y su sacrificio, en 2019, fue de 65.944 cabezas, para una producción de carne en canal de 1.070 toneladas según reportó el Dane.
Según las cifras, el sector logró un incremento poblacional de 3,19%, pasando de 1,5 millones de animales en 2018 a 1,6 millones en lo que va del 2020.
De otro lado, el sector caprino colombiano también ha mostrado un panorama positivo de crecimiento y desarrollo. En la actualidad, tiene un inventario de 1,03 millones de cabezas, según los últimos reportes, con una producción de carne en canal de 750 toneladas, según el Dane.
Los departamentos con mayor población de caprinos en Colombia son La Guajira (821.200), Boyacá (40.059) y Cesar (36.089).
A pesar de la crisis generada por la pandemia, José Carlos Arregoces Barros, presidente de la Federación Nacional de Capricultores y Ovinocultores de Colombia (Fedeanco), aseguró que el sector ha demostrado su capacidad para seguir con la producción de carne, leche y lana de excelente calidad, además de unos subproductos que le han permitido a muchas familias seguir adelante en esta industria.
Consumo y distribución
Según los gremios que reúnen a los productores y comercializadores, el sector ovino y caprino en el país ha ido en aumento durante los últimos años. Cada vez más productores le apuestan a la cría y a la búsqueda de la alta genética de estos animales pues el consumo de su carne y de los subproductos se ha convertido entre los más comerciales del mercado. Precisamente, 90% de la carne de ovino tiene como principal destino las plazas de mercado para su comercialización.
Según el Dane, en el trimestre octubre - diciembre de 2019 se produjeron 261 toneladas de carne ovina en canal, todas para consumo interno, lo que representó un crecimiento de 8,1% respecto al mismo trimestre de 2018.
De acuerdo con la entidad, el mayor volumen se destinó a plazas y famas (95,8%), que representó un crecimiento de 15,4%. Se espera que ese valor siga creciendo en los reportes para el cierre de este año
Por otro lado, vale destacar que el Invima autorizó en el país nueve plantas de beneficio en ocho departamentos: Atlántico, Córdoba, Cesar, Santander, Cundinamarca, Tolima, Antioquia y Valle del Cauca.
Esta misma entidad reportó que el sacrificio de ovinos tuvo un crecimiento de 20,5%, el sacrificio de hembras creció 84,6% mientras que el de machos disminuyó 5,0%.
En ese sentido, Hernando Mario Restrepo, creador y expresidente de la Asociación de Criadores de Ganado Ovino de Colombia (Asoovinos), en compañía de Luis Javier Rhenals y Henry Polanía, ovicultores y expresidentes de la asociación, enfatizaron en la importancia que ha venido adquiriendo este sector al ser un mercado versátil que en poco tiempo genera rentabilidad debido a su capacidad de manejo en pequeñas y grandes empresas. Sin embargo, también señalaron que se debe hacer una mayor inversión para adquirir certificaciones, permisos, genética y plantas de beneficio.