Conozca los pasos básicos del arte de montar un caballo criollo colombiano
La práctica de montar el caballo criollo colombiano cada vez se hace más popular. Ya no solo es algo exclusivo de las ferias de exposición equinas o de las cabalgatas de domingo, sino que se volvió una disciplina que capta seguidores de todas las edades.
Es tan grande el crecimiento en la última década, que el Ministerio del Deporte reconoció la chalanería (como se le conoce a esta práctica) como una disciplina deportiva el pasado 21 de agosto. Esto significa que hace parte del Sistema Nacional del Deporte y tiene vía libre para conformar la federación nacional.
En el país, según Fedequinas, hay unas 35 escuelas de chalanería con reconocimiento deportivo y unas 30 más que están por obtenerlo. La asociación realiza encuentros de este nuevo deporte cada dos meses y se disputan 10 válidas por las diferentes ciudades del país.
“En los últimos tiempos, en la pandemia, se abrieron las puertas a que la gente se volviera más sensible con los animales y la naturaleza. Ese cambio hizo que muchas personas de diferentes edades busquen el acercamiento al caballo para disfrutarlo y cuidarlo a través de la monta. Son personas que están aprendiendo cómo montar a caballo desde el respeto, el manejo, la buena conducción y la recreación”, dijo Patricia Vásquez, propietaria del criadero Villa del Suroeste.
Lo que hay que saber
¿Cuáles son las condiciones básicas que hay que tener para montar un caballo criollo colombiano, sea para competencia, esparcimiento o deporte?
Si bien esta es una práctica muy antigua, tanto jinetes como amazonas deben tener ciertas condiciones a la hora de montar como, por ejemplo, ser suave con las manos, tener firmeza en las piernas, tener buen pulso y oído y una buena capacidad para hacerse entender del animal.
Para la monta, cada actor en el gremio del caballo desarrolla su función. Normalmente, en lo que se refiere a la chalanería para animales de exposición, están los cuidadores, el palafrenero (está con el montador y le ayuda acondicionarlo) y el montador, que es el que lo exhibe en competencia.
Hoy en día, hay cursos y personas especializadas en una metodología para facilitar en el trabajo de adiestrar. Ellos enseñan las técnicas que funcionan y qué es lo mejor al momento de aprender la monta. Sin embargo, según Fedequinas, aún no está especificada una sola manera de enseñar.
“La estimulación adecuada en bebés y niños menores de 3 años, es otro programa que ha crecido en las familias y su finalidad es fortalecer social y personalmente a los niños antes de su etapa escolar y que se vinculen con los caballos desde muy temprana edad”, aseguró Sandra López Romero, coordinadora de Programas Ecuestres de Asdesilla.
Es por eso que cada vez se suman más personas a la monta para disfrutar del caballo criollo colombiano en exhibiciones, cabalgatas, festivales, remates equinos, competencias porque es claro, según los especialistas, que este ejemplar equino puede ser conducido fácilmente por niños, jóvenes y adultos sin experiencia en esta práctica. De ahí, que la afición crezca día tras día.
Tomar el oficio como una profesión
Fedequinas y el MinTrabajo hicieron, en 2021, un piloto de cualificación de aprendizajes previos de adiestramiento y entrenamiento en el sector equino para lograr que los adiestradores empíricos fueran reconocidos. Este proceso va en pro de la profesionalización del oficio. En su primera edición, impactó a 850 personas en cinco jornadas en todo el país y les permitió incluir este trabajo en sus hojas de vida. Entre septiembre a noviembre de 2022 se harán jornadas de adiestramiento y entrenamiento del caballo criollo colombiano en cinco ciudades por definir. Esta capacitación será gratuita, previa inscripción en Fedequinas, y estará enfocada a montadores y propietarios en jornadas teóricas y prácticas.