Gran Bretaña rompió el récord en los Juegos Olímpicos con un caballo raza Holsteiner
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Gran Bretaña rompió el récord en los Juegos Olímpicos con un caballo raza Holsteiner

El caballo de Collet, London 52, es de raza Holsteiner; estos caballos se caracterizan por, en su mayoría, ser usados para fines deportivos y competencias de alto rendimient
Reuters
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En la mañana de este lunes 29 de julio, la delegación de Gran Bretaña rompió un récord en lo que respecta la hípica en los Juegos Olímpicos de París 2024. Laura Collet, batió el récord en la competencia de doma clásica con una marca de 17,50. Esta se convierte en la mejor puntuación de la historia, superando a David O’Connor, que tenía el récord desde los Juegos Olímpicos de Sídney 2000.

El caballo de Collet, London 52, es de raza Holsteiner; estos caballos se caracterizan por, en su mayoría, ser usados para fines deportivos y competencias de alto rendimiento. El equino, de origen alemán, se conoce también por ser un animal elegante y con mucho potencial de salto.

Se entiende que los caballos de la raza Holsteiner solo representan 6% de la población total de los sementales europeos, volviéndolos una especie escaza y que tiene un valor agregado por su capacidad atlética y su gran versatilidad. Muestra de su gran capacidad es la cantidad de medallas de oro que han logrado en los Juegos Olímpicos.

Su musculatura pronunciada, su altura de 175 centímetros en promedio, y su característica facilidad para montar; son los aspectos que han hecho que ayude a los mejores jinetes del mundo a lograr medallas olímpicas en 1972, 1976, 1988, 1992, 2000, 2004, 2008 y ahora en 2024.

Según datos de la comercializadora de caballos, E Horses, los equinos de raza Holsteiner oscilan en su precio desde US$10.800 hasta poco más de US$21.000, hay que tener en cuenta que estos son valores para caballos que se encuentran en una edad baja, y están disponibles para la doma. Los sementales que ya cuentan con cierto tipo de adestramiento pueden tener un alza importante en su valor.

Aunque su valor sea alto, la retribución que el caballo le puede generar a su dueño también es importante. Se tiene registro de que, en Estados Unidos, hubo equinos que produjeron alrededor de US$4 millones.

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