¿Es ganadero y tiene un hato ovino? Algunas cosas importantes para su alimentación
El sector pecuario del país es amplio y variado, y aunque con frecuencia se habla de bovinos y equinos, los ovinos también representan una parte importante. Según el Censo Pecuario Nacional del ICA, se cuenta con 1.689.875 ejemplares, 36,01% de los que son machos y están ubicados principalmente en La Guajira. Por esto es importante conocer los cuidados necesarios en su alimentación, pues es un sector que espera seguir creciendo.
De acuerdo con el Manual de Veterinaria MSD, en sistemas extensivos, los forrajes de alta calidad son la mejor manera de garantizar una nutrición óptima para el hato. Esto refiriéndose a heno, gramíneas, leguminosas y, en algunos casos, forraje verde cortado. Pero ¿qué define la calidad del heno? En primer lugar, el heno es una mezcla de hierbas y leguminosas, por lo que la composición es el primer factor determinante. También, importa el momento en el que se corte, método y velocidad de recolección y la forma de almacenamiento.
Contegral, una marca de alimento para animales, establece que se benefician de pastorear en áreas en las que la vegetación sea abundante, y que tengan un acceso constante a fuentes hídricas. Sin embargo, su alimentación también varía en función de la etapa de vida en la que se encuentre el animal. Un periodo vital es el posterior al destete, pues se debe intentar que el cordero engorde a un ritmo sostenido y no excesivo.
La alimentación, además de representar una parte importante de la inversión de los ganaderos, determina el crecimiento y estado de salud de los animales. Esto porque una mala nutrición puede reducir los niveles de fertilidad y las tasas de crecimiento, a la vez que puede aumentar la tasa de mortalidad del ejemplar, principalmente en su etapa de cordero.
Por eso, en muchas ocasiones es recomendado el uso planificado de concentrado para suplir sus necesidades nutricionales del hato. Esto usualmente se da en momentos en los que la calidad del forraje sea mínima o que se estén experimentando condiciones climáticas extremas. Uno de los factores que suelen cubrirse con esto es la proteína degradable de rumen (PDR), que pueden necesitar en el periodo final de la preñez.
Sin embargo, la alimentación no es el único factor que debe cuidar de sus ovinos, pues se ven expuestos a varias enfermedades, entre las que destacan, según el ICA, fiebre aftosa, rabia de origen silvestre y brucelosis. La primera de estas suele presentarse de manera leve o que puede pasar desapercibida, pero puede causar una alta tasa de mortalidad en animales jóvenes. Entre sus síntomas destaca la fiebre y aparición de vesículas en la boca.
Por otro lado, la rabia es con frecuencia mortal, pues ataca al sistema nervioso central, causando cambios en el comportamiento, salivación abundante, ojos enrojecidos, ceguera, temblores musculares y disminución de la rumia. Los animales también son amenazados por la brucelosis, una enfermedad infecciosa y contagiosa, que impacta principalmente en las capacidades reproductivas de los ovinos.