Algunas variedades de semillas recomendadas para usar como suplemento bovino
La suplementación alimenticia en los bovinos, que consiste en agregar nutrientes con alto contenido energético y proteico a la dieta base de estos animales, con el fin de corregir deficiencias nutricionales, ha sido una práctica a la cual se ha acudido en la bovinocultura para mejorar la producción animal en aquellas regiones que, por las condiciones del suelo en determinadas épocas del año, no es posible obtener forrajes con alto potencial alimenticio.
Entre los suplementos más comunes que se vienen utilizando con este propósito se encuentran las semillas. Para saber cuáles son las más recomendables se deben tener en cuenta factores como el tipo de bovino, la zona en la cual esté ubicado el animal (trópico alto o bajo) y el acceso a recursos de producción, según indicó Edwin Castro, investigador Ph.D. Asociado del Centro de Investigación Obonuco de Agrosavia.
Roberto Rosales, gerente de TVGan, coincidió con Castro y agregó que, por ejemplo, para los climas cálidos del trópico bajo son ideales semillas naturales de pasto como el angleton y el kikuyo con las que se alimenta al ganado. Además, dijo el directivo, se han creado diferentes tipos de pasturas con técnicas especializadas de mejoramiento, como las pánico, que son materiales forrajeros muy utilizados en países como Brasil, que contiene unas semillas con unas propiedades muy distintas para este tipo de regiones, como la Mombasa y la Tanzania, en el caso de Colombia.
En cuanto al trópico alto, para animales que se encuentran en alturas superiores a los 1.500 metros, las semillas más comunes son las rey-grass, las alfalfas y la pangola. “Conforme donde se encuentren los bovinos, así mismo se dan las condiciones para los suplementos que les sean suministrados en sus dietas”, enfatizó Rosales.
Semillas de algodón, un suplemento con muchas bondades
Uno de los suplementos con más atributos nutricionales y que, por ende, es muy utilizado por los cuidadores para su suministro a los bovinos son las semillas de algodón, un producto que se destaca por su alto contenido de ácidos grasos esenciales y de proteínas, comentó Castro.
El trabajo de grado Evaluación de la semilla de algodón como suplemento en la dieta en ovinos de engorde, elaborado en 2008 por Angélica Cecilia Párraga, de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad de La Salle, en Bogotá, señalaba que, por su alta concentración de energía, proteína y fibra de alta digestibilidad, y teniendo en cuenta los valores económicos en el mercado, la convertían en una alternativa muy conveniente para alimentar bovinos.
Sin embargo, una de las limitaciones que plantea el investigador Castro acerca de la semilla de algodón es que su producción no es permanente y para su siembra se requiere un área lo suficientemente grande como para garantizar su disponibilidad.
Otro aspecto a considerar, según la investigación realizada por Párraga, es que el consumo excesivo de la semilla de algodón por el animal “lleva a una disminución en la digestibilidad de la fibra y de la energía, debido, entre otras cosas, a una depresión de la actividad microbiana”, por lo cual hay que estar atentos a si esta situación se presenta.
Las Sugerencias para una suplementación adecuada
Según Edwin Castro, investigador de Agrosavia, los productores deben tener en cuenta cuáles son las condiciones más críticas del año en cuanto a las condiciones del forraje para programar esta actividad, ojalá con el acompañamiento de un profesional y con los nutrientes adecuados que requieren, según el tipo de animal y la zona en la cual se encuentren.