Integración de parámetros a un proceso serio de producción equina
Cada vez que se plantea cómo tiene que ser un producto de formación determinado, es importante concebirlo de una forma integral, ya que deberá actuar como un todo sistémico y no como la suma aislada de las partes que lo componen.
Cuando pensamos con seriedad en lo que se puede hacer para pensar en la integración de parámetros a un proceso serio de producción equina, encontramos puntos que definitivamente nos limitan en todos los temas que manejamos diariamente. El factor de mayor influencia para estos temas, es un componente cultural muy arraigado, que sin duda debe trabajarse con respeto y análisis depurado de lo positivo y negativo que genera en el medio.
Teniendo en cuenta que no están claros los parámetros o estándares de lo que se debe criar en nuestro Caballo Criollo Colombiano, se genera un vacío desde el mismo punto de partida de nuestro mundo equino y de soporte para la inversión y ojalá rentabilidad de lo invertido en caballos.
Las áreas de lo que puede denominarse Producción Equina son múltiples, para el escrito presentado acá, solo analizaremos la selección y crianza de caballos, En estas tenemos muchas variables que comprometen los resultados esperados en nuestros ejemplares. Los apareamientos se hacen buscando una cría representativa, se basa en resultados de las competencias y no en estándares claros de la raza (ya mencionado este déficit, son inexistentes).
El factor suerte lo aceptan muchos como un hecho, tal como si fuese una lotería. Campeones que surgen de la suerte son contados en los dedos de la mano. Hay parámetros para hacer selección genética seria y coherente, pero son desechados en la mayoría de los casos. Las leyes estadísticas de probabilidades están presentes en la genética y la suerte es apenas un concepto intangible e incontrolable.
Los precios de los saltos de los reproductores son muy bajos, comparados con los de otras latitudes y otras razas. El salto de un caballo lo compran con frecuencia pidiendo rebaja o resultado de cambalaches o negocios entre aficionados.
Esto implica arrancar desde una perspectiva muy pobre para generar raza o individuos representativos. Es tan critico este tema que a pesar de los precios que rigen el mercado de los saltos de los reproductores, hay muchas personas que mantiene pendientes de rebajas que son ínfimas,$1 millón o $2 millones al hablar de un salto de un caballo es un valor irrisorio.
Si no hay presupuesto para un salto, ¿que se podrá esperar de los gastos que implica una yegua preñada y luego el potro?
La nutrición de las yeguas preñadas no es siempre la mejor y esto compromete el desarrollo fetal. Se peca por exceso y por defecto en temas nutricionales en esta y en general en todas las etapas productivas de los equinos.
Las diferentes marcas de compañías productoras de alimentos concentrados tiene muy bien diseñadas y balanceadas las dietas para cada etapa. Otros elementos que restan eficiencia en temas de nutrición es la mezcla de concentrados y las dietas “baratas” que con frecuencia diseñan en las pesebreras o criaderos.
Todo esto propendiendo por mas caballos que lleguen a ser ejemplares representativos en cualquier actividad.