Agricultores de Cundinamarca y en especial los de la Sabana, desde hace más de 4 años se encuentran en jaque por el descenso en la producción de mazorca, como consecuencia de una bacteria llamada Fusario que ataca el cultivo. Más de 50% de las siembras se han perdido, cosechas que deberían haber llegado por esta época a las centrales de abastos del país.
A lo anterior, súmele el precio de los insumos, el costo de arrendamiento de la tierra y los elevados costos de producción.
Las cifras son claras, Según el comercio de la bodega 22 de Corabastos, el descenso en el ingreso del producto ha sido significativo. En época de alta producción ingresan 40 viajes, con 200 bultos cada viaje, para un total de 8.000 bultos, ahora ingresan entre 2.000 y 250 bultos por día.
El impacto al consumidor es alto, según el comercio en época de cosecha, en los restaurantes ofrecían huevos con mazorca, envueltos, mazorca asada, mazamorra, torrejas, es decir todo aquello que se puede preparar con la cultura del maíz, que es amplia. En precios, la última cosecha hace 3 años aproximadamente el bulto de 50 kilos de primera calidad $25.000, hoy $800.000.
En Simijaca, productor de la variedad de mazorca conocida como sabanera, con un posicionamiento alto en los consumidores, el ataque a los cultivos fue alto, aunque ya está controlado la enfermedad, para ello tiene que utilizar componentes, incrementando los costos de producción.
Al año anterior, fue una época dura para el sector, en la mayoría de fincas registraron entre el 70 y 75 porciento los cortes fueron afectados.
Al mismo tiempo, los agricultores a través de los últimos años, han observado que la regiones caracterizadas en la producción de maíz están cambiando su práctica, ahora son invernaderos para producción de flores, arriendan las finca, las fincas las vuelven ganaderas y hasta construyen complejos habitacionales (apartamentos), reduciendo la frontera agrícola del departamento.
Las tierra sabaneras, están cansadas de producción, en muchos municipios los agricultores hacen todas las prácticas para el cultivo. En un fanegada hace uno años se lograba rendimientos entre 180 y 200 bultos, ahora recogen cosechas entre 70 y 80 bultos, por ello los precios mayoristas son altos, recordemos que el cierres del primer trimestre del presente año, un bulto mazorca alcanzo precio de $150.000.
Los comerciantes mayoristas consultados por Agronegocios, consideran que este año no habrá cosecha (alta producción), no hay fincas que tengan grandes extensiones de cultivos y la demanda es alta, hoy, sobre todo los jóvenes consumen maíz a través de la pizza y quienes gustan de comida fitness. Finalmente, el comercio prevé para enero del próximo año se puede presentar un aumento en la oferta, porque son los cultivos que se están iniciando en Cundinamarca