¡La ganadería es un oficio hermoso! Mi familia y yo le debemos mucho; sin embargo, debemos admitir que tenemos un enorme reto medioambiental en el futuro cercano.
En un contexto donde la sostenibilidad y la responsabilidad con el ambiente son temas cada vez más relevantes, la ganadería sostenible nos ofrece una solución estratégica tanto para la exportación de ganado en pie, de carne, así como para el desarrollo del campo colombiano y la seguridad alimentaria.
Dos grandes avances en este campo son los sistemas silvopastoriles y la ganadería regenerativa, prácticas que han transformado la manera en que se desarrolla el sistema de producción de forrajes en el país.
Los sistemas silvopastoriles son una práctica que combina la siembra de árboles y pastos en un mismo sistema de producción. Con ellos se facilita la recuperación de suelos degradados y la conservación de la biodiversidad, además de mejorar la productividad ganadera y la calidad del producto final al establecerse un ambiente más amigable para el ganado.
Esta práctica no solo beneficia al medio ambiente, sino que también proporciona a los ganaderos colombianos una ventaja competitiva en el mercado internacional al ofrecer un producto diferenciado y de alta calidad. De manera complementaria, tenemos la ganadería regenerativa, en la cual mi tío Ricardo Botero, (Q.e.p.d) fue pionero.
Estos sistemas de producción van más allá de la sostenibilidad convencional al enfocarse en la restauración y regeneración de los ecosistemas, utilizando prácticas como la rotación de pastoreo, la siembra de cultivos de cobertura, la gestión holística del paisaje y sobre todo, el aprovechamiento de los recursos nativos del suelo y de la región para enfrentar diferentes épocas de producción.
Este enfoque integral no solo mejora la salud del suelo, la captura de carbono y la regeneración de la materia orgánica, sino que también fortalece la resiliencia de los sistemas ganaderos frente al cambio climático y otros desafíos ambientales.
Estas dos estrategias, que se complementan entre sí, pueden significar la piedra angular de la ventaja competitiva que tiene Colombia.
La virtud de la ganadería colombiana radica en su tradición de criar ganado en pastoreo, a diferencia de la mayoría de los países del primer mundo e incluso de Brasil, uno de nuestros referentes en la región, donde prevalecen los corrales de engorde, o feedlots.
No me cabe duda que nuestras prácticas de producción no solamente son más sostenibles desde el punto de vista ambiental y ético, sino que también producen carne de mejor calidad y sabor, lo que hoy en día es un diferenciador clave en el mercado internacional.
Desde la industria colombiana de exportación de ganado en pie ya nos hemos puesto en marcha. Por ejemplo, todos los predios exportadores de ganado están certificados con Buenas Prácticas Ganaderas (BPG).
Esto garantiza un manejo adecuado de los animales, desde la sanidad y el bienestar, pasando por la sustentabilidad del predio, hasta las prácticas de ganadería sostenible que mencionaba anteriormente. Esto un testimonio de nuestro compromiso con la responsabilidad y la calidad de nuestro producto.
Otro hito importante en este camino hacia la sostenibilidad es el acuerdo de Cero Deforestación de la Cadena Cárnica Bovina, del cual Aexgan está en proceso de formar parte. Esta iniciativa, respaldada por organizaciones internacionales como The Nature Conservancy y la WWF, demuestra el liderazgo de Colombia en la promoción de prácticas ganaderas responsables y respetuosas con el medio ambiente.
Incluso, con el desarrollo ambiental de nuestros sistemas productivos de forrajes y la adhesión a estas iniciativas, estamos adelantándonos en el cumplimiento de requisitos de bloques como la Unión Europea, a los que en el futuro, ¿por qué no?, podríamos llegar con nuestros ganados y nuestra carne.
La ganadería sostenible no solo es importante para la exportación de ganado en pie, sino que también desempeña un papel clave en el desarrollo económico y social del campo colombiano. Al adoptar prácticas sostenibles, los ganaderos pueden mejorar la productividad de sus fincas, diversificar sus ingresos y contribuir al bienestar de las comunidades rurales.
Este enfoque de ganadería sostenible representa una oportunidad única para Colombia no solo para impulsar sus exportaciones de ganado en pie y de carne, sino también para promover el desarrollo rural, proteger el medio ambiente y garantizar la seguridad alimentaria. Es hora de reconocer y valorar el importante papel que van a jugar este tipo de estrategias en la construcción de un futuro más próspero, verde y con buen alimento para todos. ¡Desde Aexgan ya estamos comprometidos con estos objetivos exportando sostenibilidad!