Fertilizantes nacionales, ¿avanzamos después de la pandemia?
En Colombia más de 90% de las materias primas de fertilizantes o nutrientes comercializados son del exterior, la cifra de importaciones es cercana a dos millones de toneladas por año. Adicionalmente el país se ubica en el top 20 de países dependientes de nutrientes de Europa.
Desde enero de 2020 y hasta días recientes los fertilizantes incrementaron sus precios. En épocas de pandemia y pospandemia, los precios alcanzaron alzas de hasta más de 100%, se prendieron las alertas y las intensiones se reafirmaron a la búsqueda de disminuir dependencia internacional. Estas épocas nos visualizaron oportunidades de mejora y se iniciaron conversaciones afanadas tendientes a bajar dichas dependencias externas. Gobierno, agremiaciones, universidades, agricultores y empresas productoras iniciaron reuniones.
Colombia cuenta con minas de roca fosfórica, fuentes de silicio, calcio, algo de magnesio, microorganismos, diversidad de materiales orgánicos de origen vegetal y animal, por sólo mencionar los más comunes y ya empleados. No ahondaremos es aspectos técnicos, sólo dejo la relevancia de importancia de buscar mejorar la solubilidad del fósforo nacional, con procesos térmicos, microorganismos eficientes o acidulación, pocas empresas lo hacen y las diferencias técnicas que alcanzan son notorias.
Los microorganismos solubilizadores en Colombia ahora reciben mucha atención. Bacterias del suelo disuelven minerales insolubles, los géneros Pseudomonas, Enterobacter y Bacillus son particularmente activas, así mismo hongos de los geìneros Penicillium, Aspergillus, Motierella y Absidia.
Con los microorganismos se busca principalmente la disolución de apatita (roca fosfórica) y de otros minerales aplicados (silicato de magnesio, cal agrícola y dolomita) y/o la disolución de micronutrientes precipitados en suelo.
La agencia nacional de mineria viene desarrollando unas mesas de diálogo, con el tema “búsqueda de opciones de minerales para fertilizantes de producción nacional”, se avanza en planteamientos estratégicos y los objetivos principales son identificar las necesidades de minerales por parte de la industria y potenciar proyectos de exploración y explotación.
En entidades académicas ya es común encontrar investigaciones con nutrientes y biofertilizantes nacionales. Varias empresas productoras del país vienen integrando a sus fertilizantes insumos nacionales como minerales, microorganismos y materiales orgánicos de origen vegetal o animal.
En conclusión, es evidente que se ha avanzado en sensibilidad hacia el tema y en la discusión de alternativas. Ahora es tiempo de que ello comience a verse reflejado en proyectos y desarrollo de iniciativas. La esperanza se alimenta de las palabras, pero vive para siempre en las acciones. Ojalá sigamos avanzando.