Los retos de la reactivación panelera
La agroindustria panelera en Colombia desempeña un papel estratégico en la estabilidad socioeconómica del campo. Con una producción cercana al millón de toneladas por año, está fue valorada para el año 2020 en $3,2 billones (Fedepanela 2021). Es la segunda actividad generadora de empleo rural, con 350.000 familias rurales vinculadas directamente en actividades de cultivo de caña y su procesamiento. En la producción de panela se requieren 40,8 millones de jornales, lo que representa 236.392 (Rodríguez et al. 2019). Cuatro departamentos son responsables del 68% de la producción total nacional: Santander con el 22%, Boyacá con 16%, Antioquia (16%) y Cundinamarca (16%).
La producción y comercialización de panela no ha sido ajena a los ciclos económicos de la producción agropecuaria del país, con periodos de precios justos que cubren los costos de producción, seguidos de periodos de precios bajos, donde las economías regionales se ven resentidas dada la dependencia económica de la actividad por parte de los municipios paneleros. Esta volatilidad de precios ha generado inestabilidad en los procesos de desarrollo empresarial de las Mipymes que jalonan procesos de innovación y formalización. Además de profundizar la deuda social con las familias campesinas y trabajadores rurales. Disminuir la volatilidad del precio es quizás el mayor reto del subsector; lograría impulsar la sostenibilidad de la actividad. En este contexto, el plan estratégico “2018-2022 Hacia la sostenibilidad y modernización sectorial y gremial”, impulsado por Fedepanela, ha venido apuntando a generar procesos de desarrollo de nuevos canales de comercialización y fortalecer las capacidades en los agentes de la cadena. La pandemia fue un detonante que evidenció la necesidad de afianzar procesos de innovación para el desarrollo de la cadena de valor de la panela.
En el proceso de reactivación los productores y empresarios paneleros de Santander han sido dinamizadores generando estrategias para dar respuesta a los retos del subsector. El desarrollo de nuevos mercados ha sido impulsado por las exportaciones. En el período 2016-2020 se logró un incremento del 211% del volumen total, logrando en el año 2020 un valor de US$17,4 millones. Santander participa con 21% del este valor. Otro importante aporte de los empresarios santandereanos es el de atender el reto de industrialización y desarrollo de productos a base de panela. En el departamento se cuenta con empresas líderes en desarrollo de productos a base de panela, refrescos, productos con cacao, chocolatería fina y bebidas. Agroexpo 2021 fue la vitrina que mostró el avance del sector en materia de usos de la panela para la industria de alimentos.
En los aspectos de sostenibilidad, que integran los factores ambientales, sociales y económicos, hay un gran reto para la formalización laboral, dinamizar la movilidad social y disminuir el impacto ambiental. Si bien en este tema aún hay brechas por cerrar, ya el departamento cuenta con empresarios con importantes avances que se convierten en un referente para el país panelero en materia de formalización, cumplimiento normativo e innovación en el cambio de la matriz energética.
En Güepsa, los empresarios paneleros son pioneros en procesos de cogeneración de energía. En el campo de la 4.0 se tiene el reto de construir elementos de valor compartido con los consumidores, desarrollo de sistemas de trazabilidad y rediseñar la cadena de suministro. El sector tiene grandes retos para consolidarse, pero no cabe duda que se cuenta con empresarios que actualmente “construyen la nueva historia de la panela colombiana”.