Surgen nuevas variedades de yuca en los departamentos de Atlántico, Magdalena, Córdoba y Sucre
Gracias a la investigación de hace más 15 años las entidades de desarrollo tecnológico como el CIAT; Corpoica, a través del Programa de Biotecnología Agrícola; la Corporación para el Desarrollo Participativo y Sostenible de los Pequeños Productores Rurales y Corporación PBA han descubierto diversos variedades de yuca, en departamentos de Atlántico, Magdalena, Córdoba y Sucre.
Franco Alirio Vallejo, profesor de la Universidad Nacional de Palmira, en alianza con científicos del Ciat, hallaron en genotipos de yuca una alta variabilidad genética que evitaría su extinción y que, sin duda, promoverá la producción de este alimento.
“El conocimiento de la variabilidad genética de las especies facilita la toma de decisiones en los programas de mejoramiento y en su conservación. Y el germoplasma evita la pérdida de especies silvestres y cultivadas, pues prevé o reduce la erosión genética”., afirma.
Por su parte, Estela Escobar, directora del proyecto de Zona Caribe de la Corporación PBA, considera que en el país hay numerosas variedades de yuca de doble propósito, de gran uso para el consumo humano como son la negrita, Venezolana, Rojita, Caiseli, y de variedades Industriales que tienen como uso principal la agroindustria: Almidones y chips para la industria de alimentos balanceados y ganadería, que son P12, Verónica, Mtai 8, ginés, sucreña y orense.
“Con estas variedades se ha logrado obtener muy buenos rendimientos; sin embargo, en la actualidad los productores han mostrado gran interés por las variedades Venezolana, Verónica y Mtai 8”, dijo.
En cuanto a estas variedades, Escobar asegura que este tipo de productos son apetecidos, no solo a nivel local, sino en el ámbito internacional.
“Las variedades de doble propósito como la Venezolana y la Negrita tienen gran aceptación en los mercados internacionales y desde estas zonas del país se están exportando yuca parafinada, alimentos congelados y frituras a mercados de costa Rica y EE.UU”, aseguró.
En el mercado externo, las ganancias que se generan con las nuevas variedades de la yuca dependen del tipo de cultivos que, en su mayoría, son manejadas por agricultores en pequeñas explotaciones de cultivos.
“Para definir la ganancia obtenida al establecer una hectárea de yuca de las variedades mencionadas, hay que establecer la relación de costos y rendimientos por hectárea obtenidos”, asegura.
“Es así como, gracias al uso de un nivel tecnológico de 12.000 hasta 15.000 plantas por hectárea, el uso de semillas de calidad, fertilizaciones de acuerdo a los requerimientos del suelo, y un manejo integrado de malezas y plagas podemos obtener rendimientos desde 25 a 30 toneladas de yuca por hectárea. Así, se puede obtener una utilidad neta por hectárea de 20% en un ciclo del cultivo que oscila entre 7 y 9 meses”, agrega.
Gracias a este tipo de variedades, la comercialización de la yuca se convierte en otro atractivo para la industria en la agricultura colombiana.
Las variedades de yuca en el ámbito científico
Con el objetivo de examinar los nuevos cultivos de yuca, los investigadores del Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT) y de la Universidad Nancional en Palmira utilizaron marcadores moleculares del tipo microsatélites. “Estos marcadores han sido ampliamente usados para estos estudios. Se han identificado 36 como los de mayor polimorfismo y se han utilizado en investigaciones con genotipos de otros países”, reporta, en su recopilación bibliográfica, Adriana Mercedes Alzate, ingeniera e investigadora del proyecto.
“Sin embargo, en el país no se han hecho estudios de variabilidad genética que incluyan accesiones de yuca recolectadas directamente en las fincas de los agricultores del país”, añadió Alzate.