Las flores que exporta Colombia albergan especies de aves que estaban casi extintas
Colombia es mayor exportador de flores de Estados Unidos, y el segundo de todo el mundo, solo por debajo de Países Bajos. Esto, además de ser una potencia en biodiversidad exportadora, también la hace biodiversa en aves.
Diferentes organismos internacionales coinciden en afirmar que en el mundo existen cerca de 9.700 especies de aves, y según la Asociacion Bogotana de Ornitología, 1.969 de ellas habitan en Colombia, cifra que la ubican como el primer país con mayor diversidad de aves en el planeta.
Y las aves son fieles amigas de las flores. Augusto Solano, director de Asocolflores, explicaba que la existencia de estos animales en los cultivos florales son fundamentales para el control biológico de plagas. “Desde hace muchos años los floricultores trabajan en la implementación de programas ambientales que permiten la protección de la avifauna en sus cultivos y las comunidades donde están presentes”, dice Solano.
Hay una iniciativa que lleva historia en el sector floricultor y es la implementación de buenas prácticas sostenibles para perdurar más la fauna y la flora. Un estudio, liderado por Florverde Sustainable Flowers y Asocolflores, estudiará 28 fincas que tienen prácticas que han promovido la protección y propagación de la avifauna.
Aquí, encontraron que la Tingua moteada, que era una especie que solo vivía en humedales que ha sido mermada por la destrucción de este ecosistema, ha prevalecido en los humedales de las fincas floricultoras. Esta es una especie que se encontraba en peligro crítico de extinción hace una década, la cual encontró refugio y condiciones de reproducción en los reservorios de agua lluvia de los cultivos de flores (donde el 57% del agua utilizada proviene de esta fuente).
La Tingua moteada es un indicador biológico de las buenas prácticas ambientales del sector, y desde hace algunos años el símbolo de sostenibilidad de Asocolflores y uno de los resultados contundentes de la primera versión de “Las Aves de las Flores”.
En Agronegocios, visitamos una de las fincas que hacen parte de la conservación de la Tingua: Florval SAS. Una de las dos sedes está ubicada en Ubaté, Cundinamarca. La organización, según cuenta Daniel Sanz de Santamaría, gerente de la compañía, produce anualmente 65 millones de tallos, pero resalta que, como las flores son un mercado estacionario, los mayores volumenes de exportación los tienen en temporadas festivas en Estados Unidos, que es además el principal mercado con 95%.
“Las fiestas de los Estados Unidos se mueven volúmenes de flores mucho mayores, en el San Valentín, en las madres y un poco de diciembre. Depende del tipo de flor el target es interesante”, comenta Sanz. La sostenibilidad, además, es un tema que maneja la floricultura colombiana hace décadas.
Las fincas como reservorios de aves
Hay una iniciativa que lleva historia en el sector floricultor y es la implementación de buenas prácticas sostenibles para perdurar más la fauna y la flora. Un estudio, liderado por Florverde Sustainable Flowers y Asocolflores, estudiará 28 fincas que tienen prácticas que han promovido la protección y propagación de la avifauna.
Aquí, encontraron que la Tingua moteada, que era una especie que solo vivía en humedales que ha sido mermada por la destrucción de este ecosistema, ha prevalecido en los humedales de las fincas floricultoras. Esta es una especie que se encontraba en peligro crítico de extinción hace una década, la cual encontró refugio y condiciones de reproducción en los reservorios de agua lluvia de los cultivos de flores (donde el 57% del agua utilizada proviene de esta fuente).
La Tingua moteada es un indicador biológico de las buenas prácticas ambientales del sector, y desde hace algunos años el símbolo de sostenibilidad de Asocolflores y uno de los resultados contundentes de la primera versión de “Las Aves de las Flores”.
Después del café, la floricultura es considerada el segundo renglón de las exportaciones agrícolas del país, que cuenta con más de 60 especies y 1.600 variedades de flores certificadas para venta en el exterior.
“En pandemia, las flores en EE.UU. fueron un boom”
Colombia se ha caracterizado por ser un fuerte exportador de flores a potencias como Estados Unidos. De hecho, 90% del mercado de proveedores como Florval SAS es EE.UU. En este momento el sector se encuentra en una “consolidación” comercial, ya que en pandemia hubo un fenómeno que repuntó en la demanda, pero resultó ser un fenómeno de pandemia únicamente, por lo que la demanda se ha venido contrayendo en los últimos dos años. Daniel Sanz, gerente de Florval SAS, habló de la operación de la compañía y, y brindó una lectura del panorama general.
¿Cuánto produce Florval?
En esta empresa vamos a terminar produciendo unos 65 millones de tallos en 2024, y lo que tenemos previsto para el segundo semestre.
¿Cómo es la dinámica del mercado?
Las flores son estacionarias. Las fiestas de los estados unidos se mueven volúmenes de flores mucho mayores, en el San Valentín, en las madres y un poco de diciembre. Depende del tipo de flor el target es interesante.
¿Cómo les va en el mercado internacional?
Esta es una industria que lleva muchos años, y con esto se ha construido una relación muy importante con las grandes superficies de los Estados Unidos, así como Wal-Mart y Costco, por lo que ha revolucionado el mercado de las flores. Hoy, 70% de las flores van a supermercados, y 30% y van al mercado de mayoristas. El mercado de mayoristas son lo de los hoteles y floristerías, pero ahora estamos apostándole más al negocio de los supermercados.
¿Qué pasó en pandemia?
En la pandemia, las flores en Estados Unidos empezaron a hacer parte de la canasta familiar. Todo el mundo quería tener un ramo de flores porque era el contacto más cercano con la naturaleza, entonces en pandemia la demanda subió muchísimo, y benefició a las empresas de flores.
¿Fue bueno?
Eso fue bueno y fue malo, porque al ver esa nueva demanda, todo el mundo creció, y era un fenómeno de pandemia. Y una vez se acabó la pandemia, la demanda fue bajando a volúmenes normales.
¿Cuál es el aporte de su compañía al sector?
Este grupo ha sido muy exitoso, y nuestra propuesta de valor es calidad consistente. No es la mejor calidad, pero es una muy buena calidad y siempre es la misma, y eso es muy relevante en este negocio, porque a Wal-Mart no le interesa que finca vienen tus flores, o si llovió o no, lo que le interesa es que sea un producto a la calidad que la negoció.
La calidad consistente ha sido uno de los más grandes motivadores, y nos reconocen como un buen proveedor por eso. El otro concepto es que tenemos un tema de servicio superior, y estamos dispuestos a consentir al cliente. Y esto lo hacemos con la disponibilidad absoluta y total negociación a las preferencias.
¿Cómo ve el sector?
Hay una coyuntura en el sector y es que hay una inflación galopante en Suramérica, y los precios a los cuales nosotros vendemos no suben tanto, entonces, sin duda, va a haber una depuración del mercado en los próximos años, que hay pequeños productores que no aguantan, y se deben unir a otros productores, o finalmente vender a los grandes.
¿Habrá menos productores?
Estamos en un proceso de consolidación de mercado, porque la demanda que había en la pandemia ya no existen, entonces se terminarán depurando algunos productores, pero igual seguimos creciendo y contribuyendo.