La producción de coca equivale a 14% de todas las exportaciones del año pasado
A mediados de este año, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), dio una conclusión sobre Colombia: de cada 10 gramos de cocaína que se consumen en el mundo, siete los colocan los productores locales. Ahora, el Centro de Estudios Sobre Desarrollo Económico de la Universidad de Los Andes publicó un informe en el que explicó el impacto económico de esta ala del narcotráfico.
Una de las conclusiones de la investigación fue que, durante el año pasado, la producción de clorhidrato de cocaína llegó a $18,3 billones, lo que significó ventas por US$5.631 millones (al cambio promedio de 2018 por $3.150). Para entender esa cifra, en ese mismo periodo las ventas externas legales del país fueron de US$41.905 millones, por lo que el negocio de la coca representó casi lo mismo que 14% de las ventas externas.
Con estas cifras, se estima que el peso de ese negocio ilegal en el PIB de Colombia es de 1,88%. “El peso de la cocaína en la economía nacional ha vuelto a crecer a niveles muy preocupantes: en 2018 lo estimamos en más de dos veces el PIB del café que es 0,8%, y en ese año es tres veces mayor al de comienzos de década”. dijo el presidente de Asofondos, Santiago Montenegro, quien junto a Jorge Llano y Diana Ibáñez, presentaron los hallazgos del informe.
Los autores llegaron a estos cálculos teniendo en cuenta que en Colombia el precio de laboratorio de un kilo de coca para el consumo es de US$3.893, mientras que las tarifas siempre suben a medida que van saliendo del país e incluso de la región. Por ejemplo, el valor del kilo lo ubican en US$6.357, dentro del país; y cuando este llega a las zonas de frontera se revalúa 63%.
A lo anterior se suma que los seguimientos de la Dirección de Antinarcóticos de la Policía Nacional, hablan de que un kilo en Estados Unidos se negocia desde US$32.000; en Europa es aún mayor a US$60.000; y en Asia puede subir hasta entre US$100.000 y US$120.000.
Es decir que si bien en un primer escenario se obtiene un peso de más de $18 billones, las cifras pueden ser aún más grandes, “porque claramente el negocio ilegal no se puede medir como el de industrias que aportan al país”, agregó Montenegro.
Problemas en el control
Durante los últimos años las hectáreas cultivadas con hoja de coca pasaron de 81.000 a 169.000, con un alza de 108%. El presidente de ProBogotá y exministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, señaló que “esto es un efecto de cómo se ha venido afrontando el problema, y aquí intervienen debates como el de la erradicación con el glifosato”. Según Pinzón, el obstáculo para esa técnica es que ha recibido críticas de organizaciones ambientales, por el riesgo a que animales y humanos contraigan cáncer.
“Pero también hay que entender que producir un kilo de pasta de coca demanda casi dos toneladas de químicos solidados, y dos adicionales de otro tipo, eso termina en nuestros ríos, en los bosques, y le hace mal al medio ambiente”, agregó Pinzón. Finalmente, el reporte resaltó la manera en la que la rentabilidad por hectárea pasó de 4,3 toneladas hace 10 años a 5,7 en 2018, y su producción se ha vuelto más económica.