La importancia que tiene la buena fertilización de los cafetales, las claves para hacerlo
Fertilizar los cafetales es una de las prácticas esenciales para asegurar el buen crecimiento de las plantas y maximizar su potencial productivo. Según las investigaciones desarrolladas por Cenicafé, podemos aplicar una fertilización más eficiente, teniendo en cuenta varios factores clave como la época, el tipo de suelo, la edad del cultivo, la fase fenológica y el clima.
Uno de los primeros aspectos a considerar es la época adecuada para fertilizar. Es fundamental aplicar fertilizantes en los periodos húmedos, los cuales se dan al inicio de las lluvias y que esta humedad tenga una durabilidad en la cual se puedan facilitar la absorción de nutrientes por las raíces.
El tipo de suelo también influye en la eficacia de la fertilización.
En los suelos arenosos, los nutrientes se pierden más rápidamente con las lluvias intensas, lo que requiere una aplicación más frecuente, mientras que los suelos arcillosos retienen mejor los nutrientes. Conocer el tipo de suelo en nuestra finca nos ayudará a ajustar las cantidades y la frecuencia de la fertilización, optimizando los recursos y mejorando la productividad y por ende la rentabilidad.
La edad del cultivo tiene una influencia directa en el crecimiento de las raíces y su capacidad para absorber nutrientes. Las raíces activas del café suelen encontrarse en los primeros 10 cm de profundidad del suelo, extendiéndose hasta 1,5 metros desde el tallo principal. A medida que la planta envejece sus raíces crecen, lo que mejora su capacidad de absorción. Una combinación exitosa en el cultivo del café se da cuando tenemos cafetales jóvenes y realizamos una correcta y oportuna fertilización.
Otro aspecto crítico es la fase fenológica de la planta. El café atraviesa fases de crecimiento vegetativo y reproductivo que responden a estímulos ambientales, principalmente a la distribución de las lluvias durante el año. En la zona cafetera colombiana, estas fases se presentan de manera simultánea, lo que significa que en una misma planta podemos encontrar nudos, hojas, flores y frutos en diferentes etapas de desarrollo. Esta simultaneidad crea una competencia permanente por los nutrientes, por lo que es esencial garantizar una nutrición adecuada, tanto para los frutos en formación como para el desarrollo de las estructuras de soporte de las próximas cosechas.
Los estudios recientes demuestran que durante los primeros 60 a 90 días después de la floración, el fruto de café solo acumula el 13% de los nutrientes necesarios. A los 180 días, el fruto ya ha absorbido un 62%, y en los dos últimos meses antes de la maduración, se acumula un 25% adicional. Esto subraya la importancia de planificar la fertilización con suficiente antelación para satisfacer las necesidades de la planta en cada etapa que el cultivo lo requiera.
El clima también es un factor determinante en la fertilización del café. La distribución de las lluvias en las distintas regiones cafeteras de Colombia está influenciada por el movimiento de la Zona de Confluencia Intertropical, que marca los períodos secos y húmedos. Eventos climáticos como El Niño y La Niña pueden alterar la cantidad de lluvia, afectando directamente la disponibilidad de agua para el cultivo. Durante La Niña, las lluvias suelen ser más abundantes y prolongadas, mientras que El Niño trae consigo menor disponibilidad de lluvia.
En estos casos es recomendable ajustar las prácticas de fertilización, fraccionando las aplicaciones en tres momentos a lo largo del año durante los eventos de lluvias excesivas, y siendo especialmente cuidadosos durante la época de menor disponibilidad de lluvia, para evitar que los fertilizantes se pierdan por falta de disolución y por falta de agua disponible.
Fertilizar nuestros cafetales en el momento adecuado, con los nutrientes correctos y en la cantidad adecuada, es una inversión que beneficia tanto la productividad de nuestras fincas, la calidad de nuestro café y la rentabilidad. Al tener en cuenta factores como la época del año, el tipo de suelo, la edad del cultivo, las fases fenológicas y el clima, podemos garantizar que nuestras plantas reciban los nutrientes que necesitan para crecer fuertes y saludables, optimizando así el rendimiento de nuestras cosechas.
Para conocer la fertilidad del suelo y definir planes adecuados de nutrición es indispensable disponer de los resultados del análisis de suelo, herramienta que ayuda a reducir los riesgos económicos y ambientales.
Pero si no cuenta con esta información, utilice grados cafeteros para la fertilización de cafetales en producción. Para más información consulte a su extensionista de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia. Fertilizar le conviene.