Identificaron ocho virus de cultivos de papa diacol capiro y criolla en semillas certificadas
Los protocolos de protección de los cultivos son necesarios para prevenir pérdidas económicas significativas para los productores por factores externos que se piensan como inevitables como las enfermedades, virus, plagas e insectos que reducen la productividad y pueden llegar a incluso a acabar con cosechas completas.
El sector productivo de la papa en Colombia genera más de 240.000 empleos indirectos, lo que representa 100.000 familias que subsisten a base de esta práctica económica.
Los productores para evitar daños en sus cultivos, seleccionan y siembran materiales certificados, con el fin de mejorar la productividad por unidad de área en el cultivo de papa, ya que se consideran estas semillas con un alto nivel de confiabilidad y libres de enfermedades.
Andrea Stefanía García Torres, magíster en ciencias en biotecnología de la Universidad Nacional de Colombia (Unal), sede Medellín, identificó ocho virus en material certificado y no certificado de variedades de papa diacol capiro y papa criolla producidas en Antioquia y la región cundiboyacense.
"Se realizó la detección a través de métodos moleculares de ocho virus, lastimosamente los encontramos todos en este material de interés o variedades que son de las más utilizadas en Colombia, y decidimos hacer la revisión de tubérculos en semillas certificadas y no certificadas porque queríamos evidenciar cómo estábamos a nivel del país con estas semillas que aseguran tener unos porcentajes de tolerancia a ciertos patógenos, es decir, esta nos garantiza obtener cultivo libre de enfermedades con cierta calidad alta”, comentó García.
Este estudio, desarrollado junto a los grupos de investigación Biotecnología Microbiana y Biotecnología Vegetal, analizó la presencia de los virus, los cuales son X (Potexvirus), Y (Potyvirus), V (Potyvirus), S (Carlavirus), B (Nepovirus), amarillamiento de las venas (Crinivirus), enrollamiento de la hoja (Polerovirus) y mop-top de la papa de ARN (Pomovirus), mediante técnicas moleculares como reacción en cadena de polimerasa (PCR, que se utiliza para amplificar y crear copias de fragmentos de ADN de manera convencional y en tiempo real, y también usaron secuenciación de alto rendimiento (HTS).
Esta secuenciación condujo a la primera detección posible en Colombia del virus de la necrosis del tabaco D, que está asociado con enfermedades que afectan a la papa y que había sido reportado previamente en Europa.
Los síntomas de los virus pueden confundirse con carencias de nutrientes y otras enfermedades, ya que afectan la energía de la planta y provocan malformaciones, enanismo, amarillamiento de las hojas cuando la clorofila es deficiente (clorosis), y necrosis o marchitez, entre otras cosas.
El virus Y y V pueden llegar a causar pérdidas de hasta 80% a 100% de la producción, el X de 15% a 20%, S de 15%, enrollamiento de la hoja de 50% a 100%, amarillamiento de las venas de 25% a 50% y mop-top de la papa de ARN de hasta 25%.
“Los virus vegetales tienen una particularidad importante y es que su transmisión suele ser muy compleja. Ellos no buscan acabar de inmediato con su hospedante, sino convivir con él el mayor tiempo posible para replicarse y pasar a nuevas generaciones e incluso a otros cultivos”, explicó la experta.
La magíster comentó que, con el fin de evitar todos los efectos negativos en la producción agrícola, recomienda personalmente revisar y actualizar el proceso de certificación de material de siembra, mediante métodos de detección más sensibles.
La prevención de estos cultivos no se puede manejar como si fueran bacterias u hongos con la aplicación de agroquímicos debido a que ya se está infectada la planta, ya no hay nada que hacer porque es una infección a nivel celular, ya viene con la semilla.