Fertilizar y monitorear cultivos, entre los usos de los drones en la producción agrícola
El uso de drones es cada vez más frecuente en varias industrias para el fortalecimiento de las actividades económicas. La producción agrícola no ha sido ajena al boom de la implementación de este tipo de tecnología y, aunque Colombia está rezagada en su masificación, los grandes cultivos echan mano de estos artefactos voladores para realizar actividades de monitoreo y de índole operativa.
Fernando Escobar, gerente de Advector, aseguró que la tecnología está siendo utilizada para hacer inventarios de cultivos, además de estudiar los terrenos de las cosechas y la calidad del producto en gestación.
“Por ejemplo, si hago una siembra, el dron puede decirme cuánto se desarrolló finalmente y dónde no brotó la semilla. Con cámaras térmicas y multiespectrales se puede hacer un análisis del estado del cultivo”, dijo.
El experto afirma que la visión aérea de un dron puede ser útil para determinar, entre otras cosas, el estrés físico de las plantas. Al valerse de una tecnología que detecta la temperatura, el productor puede establecer si su cosecha tiene el punto eficiente de hidratación.
“Además, se puede determinar también si hay alguna plaga o enfermedad que afecte la temperatura, cuya variación puede generar dificultades”, agregó.
Algunos cultivos de difícil acceso, como la caña de azúcar y el arroz, cuando alcanzan cierta altura, pueden ser explorados de manera más fácil a través de drones.
La agroindustria también puede aplicar la tecnología de forma operativa. En primer lugar, los drones pueden usarse para la plantación de semillas. Adicionalmente, estos artefactos son de utilidad para la aplicación de insumos sólidos o líquidos en los cultivos.
“La ventaja que ofrecen los drones es que el operador no está en contacto con la sustancia y los efectos secundarios y posibles intoxicaciones se reducen considerablemente”, agregó Escobar.
Por otro lado, el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (Igac) asegura que su uso hace parte de los nuevos procedimientos cartográficos. “Contamos con drones para capturar información de áreas pequeñas o en territorios donde las condiciones climáticas son complejas para hacer aerofotografía con nuestro avión del Igac”, aseguró Ana María Aljure, directora general de la entidad.
El Instituto, además, agregó que la precisión de tecnologías como los drones permite que se generen unos sistemas cartográficos más exactos para que los territorios desarrollen sus planes de ordenamiento “con información más real”.
A través de estas tecnologías, por ejemplo, la entidad logra mayor precisión para desarrollar el catastro multipropósito, plan del Gobierno Nacional para el desarrollo del campo.