Conozca el tipo de fertilizadoras que existen dependiendo el cultivo en el que las vaya a usar
Las fertilizadoras más pequeñas que existen son las de espalda, las cuales consisten en un dispositivo bastante sencillo que se asemeja a un maletín con una manguera integrada.
Con este instrumento se aplican fertilizantes granulados como urea 17-6. 18-2.
Se puede utilizar en una gran variedad de cultivos como el café, cacao, piña y en general cultivos que necesiten de fertilizantes localizados.
Es necesario en primer lugar, dosificar la cantidad de fertilizantes que se va a aplicar. Posteriormente cargar la mochila con máximo 23 kilogramos y verificar que el fertilizante se haya compactado.
Las fertilizadoras de espalda son muy usadas sobre todo porque hacen que el trabajo de agricultor sea más fácil y rápido.
Otras fertilizadoras comunes en el mercado son las de arrastre. En estas hay varios tipos, ya que tienen un mayor tamaño y abarcan mayores terrenos en menor tiempo. Generalmente estas fertilizadoras vienen con varios depósitos con capacidades entre 150 y 6.000 litros.
Estos tipos de fertilizadoras requieren comúnmente de un tractor para poder movilizarlas y realizar la labor de fertilización más eficazmente. Además, ofrecen la posibilidad de distribuir fertilizantes de tipo sólido y líquido, por lo cual son las más usadas en grandes extensiones de tierra y en cultivos de cereales como avena, trigo, entre otros.
Por otra parte, esta clase de fertilizadoras ofrecen la opción de integrar balanzas para garantizar que la dosis de fertilizante que se va a aplicar se la indicada y otro tipo de elementos para realizar arado por ejemplo.
Una característica común que tienen las fertilizadoras es que los depósitos son aislados; en las de arrastre vienen fabricados en acero o polietileno.
Fertilizado hecho a mano
La fertilización realizada de forma manual aún es muy común en nuestros días, aunque ha venido perdiendo importancia con la fabricación de fertilizadoras como la de espalda. Sin embargo, en las fincas en las cuales la producción se realiza a baja escala es mejor seguir realizando el proceso de fertilización manualmente, pues garantiza que las dosis sean las indicadas y no se desperdicie material.