Fedegan alerta sobre el impacto del fenómeno de El Niño en la producción láctea
El impacto del fenómeno de El Niño ha ocasionado que la cadena láctea enfrente desafíos que afectan tanto a los productores como a los consumidores. En un análisis reciente, la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegan, expuso las complejidades en torno a la producción y comercialización de leche.
"Ahora con el intenso verano, fruto de El Niño que afecta la producción láctea, hoy con una reducción de algo más de 12% para este enero, la amenaza posterior del fenómeno de La Niña ya en 60% de probabilidades para octubre, según los últimos anuncios del Ideam y MinAmbiente, y el poco apoyo real de parte del Estado para reconvertir la ganadería a esquemas sostenibles silvopastoriles, la situación ganadera es incierta y será motivo de incrementos de precios al consumidor en los próximos meses de este 2024", señaló Ricardo Arenas Ovalle, especialista en gerencia de empresas agropecuarias y consultor agroindustrial, experto en producción y calidad de leche.
En cuanto a los precios de la leche, hay diferencias entre los precios de compra al productor y los precios de venta al consumidor. Aunque la producción de leche ha mantenido un crecimiento sostenido, la reducción en el precio de compra al ganadero no siempre se refleja en una disminución equivalente en los precios al consumidor.
El descenso en el precio al productor se ve influenciado por factores como la baja cotización internacional de la leche y la reducción en la tasa de cambio. Además, Arenas mencionó la estrategia de algunas marcas de reducir los precios al consumidor mediante promociones contribuye a presionar los precios de compra al ganadero a la baja.
Este escenario plantea una problemática de cara al próximo año, especialmente en la definición del esquema de precio de compra de leche cruda al ganadero. Para mejorar la situación, Fedegan propone la implementación del sistema nacional de trazabilidad de leche en polvo y lactosueros, así como el desarrollo del sello de "leche 100% colombiana" como herramientas para fortalecer la industria nacional y garantizar mejores ventas.
A esta problemática se le suma la presencia de intermediarios ociosos en el sector lácteo, quienes, al igual que en el sector cárnico, retienen una parte del valor pagado por el consumidor. Para Arenas,este fenómeno, amparado por la informalidad, afecta la rentabilidad de los productores y resalta la necesidad de una regulación estatal más efectiva.
"Por desgracia, Gobierno tras Gobierno, unos más que otros, nos hemos quedado en el discurso, en el diagnóstico, en los estudios y en las radiografías sectoriales. Unos se han arriesgado un poco más y han definido y hasta diseñado planes, programas y políticas que prometen sacar al sector de su atraso y a los productores de su pérdida sucesiva de rentabilidad, de calidad de vida y de esperanza", expresó.
Según Arenas, la firma del acuerdo de competitividad de la cadena láctea subraya la importancia estratégica de desarrollar la vocación exportadora de la leche. Este enfoque no solo busca fortalecer la economía rural, sino también contribuir a la construcción de la paz.
"La lógica diría que el precio al consumidor también se reduciría, pero no es así. Casi nunca es así. La industria mantiene los precios de venta al consumidor altos bajo argumentos, unos ciertos otros no tanto, de costos de industrialización, costos de intermediación de la cadena comercial y competencia desleal, como las leches de mala calidad adulteradas con sueros", afirmó.
Desde el gremio advierten sobre la implementación efectiva de políticas y programas en el sector lácteo. "A menudo recursos públicos y ayudas internacionales se dilapidan sin llegar a soluciones concretas para los productores", concluyó el experto.