Fedearroz pide a empresarios ser más sostenibles por los altos costos de producción
El Gerente General de Fedearroz, Rafael Hernández Lozano, se mostró preocupado por los efectos negativos sobre los costos de producción que está teniendo la crisis de los contenedores que se presenta en el mundo desde hace unas semanas.
El dirigente gremial señaló que tal situación ha influido en el alto costo de los fertilizantes, que representan más de 20% del valor de la producción de arroz, mientras que los agroquímicos y otros insumos representan cerca de 15%.
Asimismo, que la ruptura de la cadena logística mundial, que ha llevado a que los fletes marítimos hayan aumentado hasta 400% por efecto de escasez de contenedores, generó en los últimos dos meses un aumento atípico en la canasta de fertilizantes cercano a 40% y 20% en promedio en productos como herbicidas, insecticidas y fungicidas, adicional al incremento presentado por estos mismos insumos en la cosecha del primer semestre del año, situación que acabaría por completo con la rentabilidad de los productores, si los precios del arroz paddy verde se mantienen bajos como sucedió durante la época de cosecha del segundo semestre de 2021.
Ante esta difícil situación, la Federación Nacional de Arroceros manifestó que ha considerado de suma importancia que los agricultores colombianos fortalezcan la adopción de las tecnologías de que dispone Fedearroz - FNA para el cultivo, a fin de reducir costos de producción y por ende mejorar la rentabilidad.
“Es muy importante frente a este propósito, contar con el apoyo del gobierno en materia de impulso a la asistencia técnica y el establecimiento de mecanismos adicionales que mitiguen el impacto de los precios de los insumos, creando las condiciones para garantizar las siembras del primer semestre del año 2022 y con ello asegurar el empleo rural y la seguridad alimentaria nacional, especialmente de la población de menores ingresos”, indicó Lozano.
Desde Fedearroz estiman que el incremento inusitado de los costos de producción lleve a la reducción de las siembras en el segundo semestre de 2021 y tenga el mismo efecto en el primer semestre de 2022, con lo que el inventario podría normalizarse y -como consecuencia - se recupere el precio del arroz al productor, factor indispensable para que garantizar las siembras y la autosuficiencia en el mercado, como ha ocurrido en los últimos dos años, cuando no se ha acudido a importaciones.