Estudiarán el efecto de la extracción en la diversidad de orquídeas epífitas en el país
La bióloga Paula Andrea Morales, estudiante de la Maestría en Bosques y Conservación Ambiental de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Medellín, fue otra de las ganadoras de las Becas Colombia Biodiversa, de la Fundación Alejandro Ángel Escobar (FAAE), con el proyecto “Efecto de la extracción sobre la diversidad de orquídeas epífitas en bosques andinos del departamento de Antioquia”.
La propuesta fue seleccionada por ser “estructurada y pertinente, ya que se circunscribe a una problemática vigente de conservación”, afirmó el jurado de esta beca de la FAAE, conformado por Luisa Fernanda Lema, María Camila Pizano y Alberto Aparicio.
La estudiante se presentó a la convocatoria 2020-1, motivada por el interés de evaluar una de las principales amenazas a la conservación de estas orquídeas en Antioquia, que es "la extracción o sobreexplotación a las que son sometidas".
En su proyecto explica que las orquídeas figuran entre las plantas más amenazadas del planeta. A la fecha, solo han evaluado el riesgo de extinción del 3,3 % del estimado de las especies bajo criterios de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), y casi la mitad se encontraron en peligro de extinción.
“Además de la deforestación –amenaza generalizada para la biodiversidad–, la extracción de las orquídeas epífitas (que crecen en otros vegetales) es bastante fuerte debido a su valor ornamental, por lo que suelen extraerlas de sus medios naturales en forma masiva”, afirmó la bióloga Morales.
El norte de los Andes en Colombia es uno de los puntos calientes mundiales en diversidad y endemismo de orquídeas y un lugar donde ocurrieron extracciones masivas entre los siglos XVIII y XIX, prácticas que "continúan en el presente con poca regulación y documentación por las autoridades ambientales".
Dada la falta de información e investigación sistemática, y a lo fundamental de conocer el impacto de esta práctica sobre las comunidades naturales de orquídeas en el país, el objetivo es estudiar el posible efecto que tiene la extracción de las epífitas sobre la estructura y dinámica de las poblaciones y comunidades de estas plantas en bosques andinos, comparando parámetros poblacionales y de comunidades en bosques afectados por la extracción con aquellos no afectados.
La bióloga Morales explicó que se quiere evaluar si la práctica de extraerlas de su medio natural afecta las comunidades y las poblaciones en los bosques. La propuesta fue construida con sus asesores Julián Aguirre, de la UNAL Sede Bogotá, y Cristina López, de la Universidad de Antioquia, partiendo del objetivo de enfocarse en la conservación de epífitas, plantas que viven sobre los árboles.
“Si bien Colombia tiene legislación sobre impacto ambiental y comercio de orquídeas, los decisores tienen poca información sobre la ecología de estas plantas para apoyar o reforzar acciones de conservación, específicamente sobre políticas de control de extracción y recomendaciones para mitigación de impactos y uso sostenible”, agrega.
Desde su graduación como bióloga, Paula estuvo muy interesada en conocer la ecología de estas plantas y trabajar para su conservación, a través del estudio de su biología reproductiva y la dinámica de comunidades, y por ello la Maestría fue el escenario perfecto para desarrollar un proyecto enfocado en el tema.
“Aspiraba ganar esta beca para obtener fondos y llevar a cabo la fase de campo de la investigación de maestría, que tiene como fin generar información útil para contribuir con la priorización y toma de decisiones de las autoridades ambientales sobre políticas de control de extracción de orquídeas en la región”, comentó la investigadora Morales.
Especificó que, por ejemplo, las Corporaciones Autónomas Regionales no siempre tienen los insumos científicos necesarios para tomar decisiones acertadas que favorezcan la conservación de la diversidad y los ecosistemas.
Considera además que la socialización y publicación de dicha información podría derivar en el desarrollo de acciones que reduzcan el riesgo de extinción de las orquídeas en Colombia y la articulación de estrategias para mejorar el conocimiento sobre el estado de conservación de estas especies.
El proyecto está planteado para ejecutarse en los municipios de Frontino, Amalfi y Jardín, en los que hay reportes históricos de extracciones de orquídeas epífitas.