El comportamiento del negocio de las gallinas ponedoras y cómo puede entrar en él
Dentro del positivo avance de la industria avícola colombiana, el país ha venido mejorando en la oferta de la genética disponible para los diferentes negocios que permite la cría de aves de corral.
Cada vez son más y mejores las empresas que ofrecen a clientes pequeños, medianos y grandes diferentes opciones de gallinas ponedoras, pollos recién nacidos para su levante y engorde, genéticas especializadas según los objetivos y una gran cantidad de servicios complementarios necesarios para el negocio avícola.
Son quizás las gallinas ponedoras el centro de atención de una de las dos ramas importantes del negocio: la postura de huevos. Y estas gallinas se pueden adquirir a avícolas especializadas que llevan décadas en el mercado y que han desarrollado altos estándares de producción, calidad y servicio para el beneficio de los productores.
Aunque son muchas las alternativas, en el mercado colombiano predomina la oferta de las razas Hy-Line Brown, Babcock Brown e Isa Brown, gallinas con unas características muy definidas que las hacen las mejores opciones para entables pequeños, medianos y grandes.
Son aves de color marrón, consideradas por los expertos como aves rústicas, que ponen huevos también de color marrón y que tienen condiciones de manejo y de resistencia mucho mejores que otras líneas. Se adaptan a diferentes pisos térmicos y temperaturas y son más resistentes a enfermedades o patologías, siempre y cuando su manejo sea adecuado.
La Isa Brown es la ponedora de referencia desde hace más de 35 años en todo el mundo. Se adapta a todos los climas y condiciones ambientales y es considerada la ponedora más “eficiente” del mercado, produciendo muchos huevos de alta calidad
También se ofrece la Shaver Black, conocida como la Reina Negra. Al igual que las anteriores, seadapta bien a todos los climas y tiene buenas cifras de producción de huevos tanto en cantidad como en tamaño.
Los precios de una gallina ponedora varían según su genética, sus días de nacida y su peso, entre otras características. Por ejemplo, el precio de una pollita ponedora de un día es de alrededor de $4.000 y si ya es una gallina para entrar en producción, que es a partir de las 16 o 17 semanas, varía entre $23.000 y $25.000.
Para un galpón pequeño de 100 aves, se necesitará invertir entre $2,3 millones y $2,5 millones aproximadamente, con gallinas de buena genética.
Aunque se pueden conseguir más baratas, será un ahorro que quizás se pierda en la fase de producción, ya que posiblemente sean aves que pondrán menos huevos y de una calidad inferior. Por lo tanto, al momento de comprar las ponedoras, es mejor invertir un poco más de dinero para garantizar una óptima producción.
¿Dónde se compra una gallina ponedora? Existen muchas ofertas, de acuerdo al tamaño y a la especialización del negocio.
Existen varias “mega” avícolas de genética, que cubren casi todo el territorio nacional y son las encargadas de surtir a los grandes productores del país con las aves tanto para producción de huevos como de carne.
Colaves, Avícola Altagracia, Distribuidora Avícola, Elitte Avicultura, Josefina Soluciones, son algunas de las más reconocidas y de cobertura nacional. También hay distribuidoras que venden aves de estas avícolas o de otros productores.
Con medio siglo de experiencia y una madurez tanto en sus líneas genéticas como en su oferta de servicios, Colaves vende cajas por 100 unidades (aves) más el 2% de bonificación, que es el estimado de muertes en las primeras cuatro semanas con un buen manejo. O sea 102 unidades por caja. Atienden clientes desde tres cajas, o sea 306 aves, hasta clientes mega productores que pueden comprar entre 90 o 100.000 aves por entrega.
Por lo general, campesinos y muy pequeños productores para consumo local, acuden a almacenes agrícolas donde pueden conseguir ejemplares con cierta genética o mezclados con razas criollas, que seguramente les darán sus huevos diariamente, pero no del tamaño y la calidad necesaria.
La vida útil de una gallina ponedora de buena genética es de 90 a 100 semanas y las empresas logran tener huevos jumbo.
Estas empresas grandes, como Colaves, tiene acompañamiento tras la venta de aves, soportados en un robusto departamento técnico de veterinarios y especialistas que, dependiendo de la venta, asesoran al productor. También ofrecen una cartilla ilustrativa con todas las explicaciones de alimentación, galpones, bioseguridad, etc, que necesitan los avicultores para iniciar un entable productivo.