Cultivos más sostenibles a nivel social si se hacen con prácticas agroecológicas
Paula Rugeles Silva, investigadora de la Universidad Nacional encontró que Las fincas con manejo agroecológico tienden a dar mayor seguridad alimentaria de la población campesina, a ser resilientes, autónomas y conservacionistas, además de contar con mayor diversidad y abundancia de especies, lo que proporciona un equilibro en la calidad del suelo.
La investigación se enfocó en las veredas El Mesón y Arenillo, de Palmira (Valle del Cauca), para establecer cómo interfieren los sistemas de producción en el ambiente y el bienestar de la comunidad. Para lograr el objetivo evaluó la agrodiversidad en tres sistemas de producción: agroecológico, en transición y convencional, desde la caracterización social, económica y ambiental.
Como resultado identificó que los sistemas de producción más frecuentes del territorio fueron los agroecológicos (manejo cultural, eliminación de productos químicos, participación familiar, autoconsumo), el convencional (control de plagas con agroquímicos, fertilización química, fin comercial) y los de transición (uso reducido de fertilizantes y pesticidas sintéticos, combinación de técnicas tradicionales y tecnológicas moderas).
La investigadora aseguró que “el sistema agroecológico tiene un equilibrio en el factor social y biológico, que aunque puede no verse representado en la productividad, porque parte de la producción es para autoconsumo, sí les confiere características de bienestar a las familias, que es la finalidad de la agroecología”.