¿Cómo se adecuaron las gramas en Qatar 2022? Conozca el proceso de siembra para un césped natural deportivo
Una de las innovaciones para el Mundial de Fútbol Fifa Qatar 2022 es su desarrollo de gramas naturales en sus estadios. El país instaló un vivero en la zona norte de Doha, ocupando un área establecida de 880.000 metros cuadrados. Este cuenta con 679.000 arbustos y más 16.000 árboles y el desarrollo se realizó con el objetivo de realizar gramas resistentes a los diferentes tipos de luces y para brindar un mayor confort a los jugadores.
Según Arpasa, compañía española especializada en la construcción de terrenos deportivos y jardinería residencial, los céspedes establecidos en los estadios cataríes requieren una menor cantidad de agua en comparación a otras gramas, y fueron diseñadas para que puedan permanecer verdes por largos periodos de tiempo. En estos, el balón se desliza de una forma natural.
¿Cómo se siembra un césped natural para estadios?
Agronegocios consultó con Javier Sarmiento, experto en instalación de jardinería y campos deportivos sobre algunos aspectos a tener en cuenta para la siembra de gramas naturales deportivas.
"Podemos encontrar diferentes tipos de gramas para diversos climas. Nosotros solemos utilizar la "bermuda grass" en ambientes cálidos y para los climas fríos utilizamos la semilla "mustang", comentó el experto.
Para estos campos se recomienda usar 1 libra de grama de 454 gramos, lo cual alcanza para cubrir un área de 15 a 20 metros cuadrados aproximadamente. En cuanto a los métodos de siembra se debe tener en cuenta que el terreno se prepara y se debe realizar una fertilización adecuada.
"Para realizar una fertilización adecuada primero se debe realizar un análisis de suelos para canchas, y así conocer los nutrientes disponibles en los suelos", dijo. Dependiendo del análisis, se pueden realizar correcciones en el pH de ser necesario.
Para empezar, se debe tener en cuenta que el área donde se va a sembrar la semilla de grama debe estar totalmente limpia de malezas y otros pastos. "Cada semilla sembrada va a ser una planta, se garantiza una buena cobertura en la zona si aplicamos la dosis correcta", indicó.
Se procede a picar y descompactar el terreno, y luego se incorpora al suelo una materia orgánica. Después se nivela totalmente el terreno y se humedece.
La semilla debe quedar esparcida de manera uniforme sobre la zona donde se va a sembrar. Se debe realizar un riego cada dos días, dependiendo de la necesidad de la grama.
Durante el primer mes se debe realizar un buen proceso de fertilización y se recomienda no pisarla hasta que tenga mes y medio de haber sido establecida.