¿Cómo realizar un proyecto de agricultura inteligente para la optimización de recursos?
En el marco de la feria Expoagrofuturo 2022 se realizaron charlas sobre recomendaciones técnicas para la optimización del rendimiento de los cultivos. Lucas Ataide, director comercial de Agrobit lideró un conversatorio sobre cómo realizar un proyecto de agricultura inteligente. Esta es un área que integra la tecnología como un medio para lograr la optimización de los recursos destinados al agro; además de la preservacion y mejora del medio ambiente. Los pequeños y medianos agricultores lo pueden implementar a través de tres principios: planificar, gestionar y medir.
"Hoy podemos evidenciar que la digitalización ha alcanzado un gran segmento del sector agro. Sin embargo, aún falta más desarrollo en tecnologías que generen recomendaciones. Los agricultores ya cuentan con una gran cantidad de datos sobre sus cultivos, y justamente la propuesta de una agricultura inteligente es integrarlo con datos de mercado, clima, informacion satelital que le permita a los modelos tecnológicos recomendar qué hacer, en qué lugar y en qué momento", comentó Ataide.
Para la realización de un cultivo, como primer paso Ataide resalta la importancia de la planificación. Hay que resaltar que la aplicación de este modelo no necesariamente requiere de alta tecnología. Por eso, para un contexto de medianos y pequeños productores, desde la agricultura inteligente se considera fundamental el planificar la producción para poder medir correctamente en los cultivos.
Entre las estrategias está el tener un control y un plan de las actividades que se van a realizar en el cultivo; cómo el de consultar información satelital y de clima que nos permitan entender el modelo agrícola completo.
"Si yo no mido, desconozco; y si no conozco, no puedo saber como comparar y corregir. Ese es el concepto más importante que se le puede dejar al pequeño y mediano productor, generando un gran cambio a nivel de rentabilidad y sostenibilidad".
Los beneficios de la implementación de una agricultura inteligente son una reducción del impacto ambiental, optimización del uso del agua, una mayor educación del agricultor para implementar mejores prácticas, un mayor control de riesgos y un incremento de la producción. Este modelo genera un retorno a la inversión y un saldo positivo ambiental de manera rápida.