César Andrés Cocomá, un guardián de las abejas y empresario de actividades apícolas
El diario La República, en asocio con su publicación Agronegocios, dio a conocer la lista de 30 personas nominadas a la Distinción a los desarrolladores del agro 2022. Las tres categorías en las que estos candidatos competirán son Sembradores, Agroindustriales y Digiagro, y cada una de sus historias será contada nuevamente para los lectores.
Cabe recordar que, en la categoría Sembradores, el objetivo es reconocer a los emprendedores del agro, a esas ideas que surgen en un rincón apartado del país o desde una parcela de tierra pequeña. En Agroindustriales, la idea es exaltar a las grandes industrias y compañías que trabajan en el sector, generan empleo y dejan en alto el nombre de Colombia. Por último, en la categoría Digiagro, se destacarán las iniciativas de innovación y tecnología por ser disruptivas en los negocios agropecuarios.
Sembradores
El décimo y último nominado en la categoría Sembradores es César Andrés Cocomá, un empresario que se dedica a la industria apícola y que se reconoce a sí mismo como un guardián de las abejas.
El negocio comenzó en 1985, cuando su padre y su tío hicieron un curso en el Sena sobre el arte de las abejas. “Luego comercializaron los productos y ya era parte de la economía familiar, pero no era la actividad principal. En ese tiempo teníamos miel de abejas, polen, propóleo, pero hace nueve años la vida nos dio un giro total y tuvimos que arrancar desde cero y nos unimos como familia y se convirtió en el negocio de todos nosotros, para cuidar a las abejas y de lo que producen tener nuevos subproductos”, dijo.
Pero como buen empresario, decidió mirar otros segmentos del mercado, desarrollando productos como vinagre de miel con frutas, cremas de miel con chocolate y mantequilla de las almendras, cerveza de miel, hidromiel, y 16 tipos de jabones con frutas.
Cocomá no solo ve a la apicultura como una actividad comercial, sino que hace de ella una forma de protección a los polinizadores. “Hemos generado nuevos productos con un mensaje y un propósito adicional, más allá de lo que vendemos y de los recursos que nos llegan, lo importante es cuidar de ellas”, dijo.
Los apiarios están distribuidos en Anzoátegui, Alvarado, Nariño e Ibagué, todos en Tolima. Además, cuentan con una planta certificada por el Invima para transformación de los productos.
La compañía familiar tiene alianza con apicultores en 14 departamentos, y se especializan en mieles de origen. “Nosotros quisimos dar ese salto ya que Colombia tiene más de 1.000 tipos de mieles. Esto, resultaría en ser uno de los países con mayor diversidad en el mundo”, dijo.
“Colombia es el segundo país más diverso en flora del mundo; tenemos una grandiosa variedad de mieles, con una densidad, color, aroma y sabor diferente, dependiendo de cada región de su origen”, concluyó.