Campesinos cuentan con nuevo modelo de vivienda rural y social
La modificación inicia con un cambio en el tamaño de las viviendas que se otorgan: pasarán de 32 metros cuadrados a 55 y 60 metros cuadrados.Las viviendas, tal y como explicó el asesor de vivienda rural de Minagricultura, Daniel Sussmann, contarán con tres habitaciones (a diferencia de las dos proyectadas en el anterior esquema), cocina, área múltiple, batería sanitaria, cuarto de herramientas, una terraza exterior cubierta, y una alberca para almacenamiento de agua, ubicada en la parte trasera de la propiedad.
“El proyecto es profundamente interesante. El ministro quería cambiar radicalmente lo que se venía trabajando como vivienda de interés social. Lo que hoy se entrega es una casa digna, con sus acabados, y en términos de infraestructura, mucho más ambiciosa”, afirmó Sussmann.
La meta del proyecto, relató Sussmann, busca cubrir 15.000 casas, las cuales serán financiadas en un 100% por el Minagricultura, siempre y cuando las propuestas de construcción sean presentadas por los entes territoriales.En caso de ser presentada por gremios, asociaciones campesinas o federaciones, como contrapartida, éstos deberán financiar 50% del valor de la vivienda.
El costo estimado por inmueble ronda los $33 millones, es decir, poco más de 55 salarios mínimos mensuales.Otra de las ventajas del nuevo esquema está en los plazos. Anteriormente, entre convocatoria, construcción y entrega, Minagricultura demoraba 27 meses. “Hoy, con el nuevo decreto reglamentario, el tiempo es de cinco meses”, aseguró el asesor.
Para el Ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, la entrega de las viviendas rurales en el nuevo esquema es necesario pues “el impacto es impresionante. Por cada dos viviendas ayudamos a salir a una familia de la pobreza, lo que nos permite llevar más equidad al campo”.En total, el Gobierno espera invertir, a través de desembolsos del Banco Agrario, $500.000 millones en la construcción y adecuación de vivienda rural en el territorio nacional.